Los dos perros se cebaron con las ovejas que sorprendieron en el interior del corral, matando en el acto a dos animales.

Dos ovejas ibicencas muertas, una desaparecida y una quincena malheridas. Es el resultado del último ataque sufrido por un rebaño de ovejas en una casa de Sant Rafel.

«Vimos a los dos perros, uno grande y negro, el otro un pastor alemán, pero cuando llegamos al corral ya había hecho la masacre», apuntaron al PERIÓDICO de IBIZA Y FORMENTERA Josefa Prats y Ramón Ribas, de Can Moreno.

El ataque se produjo a última hora de la tarde del viernes. Los perros atacaron primero a las ovejas que estaban por el campo y, posteriormente, se colaron en el corral y se cebaron con los animales que estaban encerrados.

Josefa, Ramón y su hijo salieron e intentaron alcanzar a los perros, pero no lo consiguierom. Al regresar al corral observaron con desolación la escabechina.

El recuento de los daños deja dos animales muertos y uno desaparecido. No obstante, Josefa teme que en los próximos días se produzcan nuevas bajas ya que algunas están muy malheridas y podrían tener que ser sacrificadas.

Can Moreno está ubicada en una zona de Sant Rafel donde la pasada primavera los ataques cometidos por perros causaron más de medio centenar de ovejas y cabras muertas.

Natalia Ribas, veterinaria de l'Agrupació de Ramat Boví d'Eivissa, apuntó que el panorama que se encontró en Can Moreno fue «desolador. Los animales que estaban en el corral no tenían escapatoria y los dos perros se cebaron con las ovejas y los corderos», indicó Natalia Ribas, quien añadió que los animales tienen mordiscos por todo el cuerpo.

La veterinaria agregó que los animales «están en shock, tienen muchas lesiones en el cuello y algunos sufrieron la amputación de las orejas». Incidió en el hecho de que, como en otras ocasiones, «los perros atacan por atacar ya que no buscan alimentarse».

La propietaria de las ovejas lamentó el ataque e hizo un llamamiento a los dueños de los canes para que controlen a sus animales y evitar estos trágicos hechos.