El periodo de autorización de pesca se cerró el 31 de agosto, por lo que ahora sólo se podrá encontrar langosta roja en los viveros.
Desde la institución han recordado además que es la segunda temporada en la que el departamento de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino del Consell ha impulsado la campaña de etiquetado individual bajo la marca Sabors d'Eivissa, gestionada por el Consell con la participación de las Cofradías de Ibiza y Sant Antoni.
Esta etiqueta ha permitido identificar la langosta pescada en Ibiza y diferenciarla de la de Mallorca o de la procedente de las costas de África, garantizando así su calidad. Según el Consell, este año ha habido un aumento de las capturas, recuperándose niveles similares a los máximos registrados en 2003.
Desde Medio Ambiente se ha destacado que, gracias a un esfuerzo continuo, las capturas están muy por debajo de las de Menorca, que con un perímetro de costa similar, llegaron a más de 12.000 kilos en 2014.
Además, el etiquetado de la langosta de Ibiza ha permitido iniciar actuaciones de promoción del producto en el ámbito gastronómico, como la participación en la Feria Alimentaria de Barcelona y el Fórum Gastronómico de Ibiza.
Así, un producto que tenía una visibilidad limitada fuera del entorno marinero y de restaurantes tradicionales, se ha visto proyectado a nivel nacional e internacional.
Según el Consell, este buen resultado ha supuesto el traslado de iniciativas similares a otros productos, que han comenzado a etiquetarse en 2016.
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