Por unos segundos, el cielo de Vila se convirtió en un arco iris. | Daniel Espinosa

Tras el éxito de la primera gran fiesta Holi celebrada en el marco de las Festes de la Terra, la concejalía de Joventut del Ayuntamiento de Eivissa organizó ayer una fiesta de colores para los más pequeños. Una cita previa al arranque del curso escolar que divirtió a los participantes y que simbolizó el inicio de una nueva etapa. Los más pequeños acudieron puntuales y de riguroso blanco a la cita a la plaza Antoni Albert i Nieto, donde recibieron las bolsitas de polvos de colores. Media hora más tarde, el cielo de Vila se iluminó con una auténtica lluvia de colores y juventud. La fiesta previa al inicio de curso continuó con la música a cargo del dj Juan Moreno.