Los paradistas se reunieron con miembros del Ayuntamiento y de Pimeef. Foto: ARGUIÑE ESCANDÓN

Alrededor de medio centenar de paradistas del Mercat Nou de Vila se reunieron ayer con representantes del Ayuntamiento de Eivissa y miembros de Pimeef para conocer de primera mano el proyecto del nuevo centro de ocio que albergará un supermercado y un mercado tradicional.

Los comerciantes pidieron ‘números' para poder decidir si quieren mantener sus puestos cuando acabe la concesión en agosto de 2018. Sin embargo, el primer teniente de alcalde de Vila, Alfonso Molina, explicó que el proyecto todavía está en una fase muy primigenia como para poder hablar de cifras y que los comerciantes tienen hasta el 15 de septiembre para decidir si van a seguir o no.

Mercado provisional

Una vez acabe la concesión se iniciará un proceso de licitación y los comerciantes que consigan la adjudicación serán trasladados a un mercado provisional, probablemente instalado bajo una carpa, que estará cerca del actual Mercat Nou aunque la ubicación exacta todavía no se ha decidido. «La ubicación dependerá del número de paradistas porque no es lo mismo montar un mercado para 20 puestos que para 80», explicó.
Molina destacó también el «gran interés» mostrado por los comerciantes presentes en la reunión por un proyecto que calificó de «mercado del siglo XXI» y «un polo de atención para todo el barrio del Eixample».

El Ayuntamiento de Eivissa incluirá una partida en los presupuestos del próximo año para iniciar los estudios previos a la construcción con el objetivo de que en 2018 el proyecto esté cerrado y las obras empiecen cuanto antes mejor.
Por su parte, el vicepresidente de la Asociación de Comerciantes del Mercat Nou, Vicente Calbet, explicó que durante la reunión, había habido «discrepancias» de los paradistas con el futuro proyecto aunque matizo que, en general, se había valorado «de manera positiva».

Calbet pidió a los responsables municipales que aclaren en el menor plazo posible las futuras condiciones económicas de los paradistas en las nuevas instalaciones para que cada uno de los paradistas pueda decidir si le interesa seguir o no en el mercado.