Imagen de la ‘caravana’ de taxis que no cargaron viajes durante una hora para protestar.

Medio centenar de taxistas, principalmente del municipio de Sant Josep que son los que operan en el aeropuerto, protestaron de manera pacífica la noche del jueves al viernes para reclamar que se hagan controles «efectivos» contra los taxis pirata. Así, durante una hora (entre la una de la mañana y las dos) no cargaron ningún viaje y se dedicaron a informar a los turistas que aguardaban un taxi los motivos de su protesta.

Improvisado

«Ha sido todo improvisado. Hemos estado durante una hora hablando con los turistas y ellos entendieron perfectamente nuestra situación; nos apoyaron muchos municipios y no cargó casi nadie, excepto unos pocos, que están en su derecho de no secundar la protesta», explicó uno de los participantes en esta acción reivindicativa contra los piratas del taxi. La movilización pacífica, además, tuvo un ‘efecto llamada' de otros municipios y fueron muchos los taxis que se acercaron al aeródromo para sumarse a la iniciativa. La Policía Local de Sant Josep, según explicaron los profesionales del taxi, se personó durante la hora de paro de actividad y exigió documentación a algunos de los taxistas, además de requerirles que cargaran viajes para evitar la cola de viajeros esperando taxi.

Los participantes en la protesta aseguraron que están «cansados de la impunidad» con la que operan los piratas en lugares como el aeropuerto, además de «estar también cansados de que se nos prometa que se harán controles y nunca pasa nada; todo sigue igual». Los profesionales legales del taxi no descartan llevar estas protestas pacíficas a otros municipios con gran afluencia turística para visibilizar su malestar con los ilegales del sector.

Esta protesta se suma, además, a otras acciones que están llevando a cabo los taxis legales para disuadir a los piratas que se concentran en puntos de gran afluencia turística para cargar viajes de turistas.

L A N O T A

«Ni rastro» de los inspectores, según los taxistas

Los taxistas legales lamentaron la «falta de control» sobre la actividad ilegal del transporte y aseguraron que no hay «ni rastro de los inspectores de transporte» que se prometieron que vendrían para combatir la oferta ilegal de transporte.