El portavoz del Grupo Popular en el Ayuntamiento de Sant Antoni, Pepe Sala, ha asegurado no entender el "empecinamiento del alcalde", José Tur Cires, en negarse a obtener la declaración del puerto de Sant Antoni como frontera Schengen, alegando que no es necesaria para la llegada de cruceros al municipio.
Los populares consideran que "esta afirmación no es correcta, ya que es necesario que haya control de pasaportes para que puedan atracar o fondear cruceros con escala en países no comunitarios". "En cualquier caso esta declaración facilitaría la promoción del destino y ampliaría el número de cruceros con posibilidades de recalar en el municipio", afirman.
Sala ha indicado que, si no fuera necesaria la declaración de puerto Schengen para promocionar adecuadamente el destino "no entendemos cómo otros lugares como Palamós llevan tanto años intentándolo y están dispuestos a realizar importantes inversiones para conseguirlo". Para el grupo popular lo mismo ocurre con el puerto de Ciutadella que "a pesar de contar con instalaciones de atraque aún no lo ha logrado y su situación dio pie a un titular en prensa que decía: "Schengen echa a Ciutadella del tráfico internacional de cruceros"".
Según el líder de la oposición de Sant Antoni "tampoco es justificación para no luchar por este objetivo ya que quienes generan un verdadero impacto en la economía local son los pasajeros que no contratan excursiones y permanecen en la población de atraque. Estos se quedan en Ibiza y no vienen a Sant Antoni", asegura.
El portavoz popular ha querido insistir en que, tanto en la moción presentada en el Consistorio como en sus posteriores declaraciones "he dejado claro que nos estamos refiriendo a cruceros que estén interesados en fondear en la bahía, no a construir instalaciones que les permitan atracar. Muchas compañías no tienen inconveniente en hacerlo así y de hecho lo hacen en muchas de sus escalas preferidas".
Según ha declarado Sala, en su etapa de alcalde de Sant Antoni y como consecuencia de una feria del sector crucerístico a la que asistió el Consell Insular "detectamos el interés de algunas navieras en programar escalas de sus cruceros en Sant Antoni. Desde el Ayuntamiento les invitamos a conocer nuestros atractivos turísticos". Entre estas empresas destacan Carnival Cruise Lines, Holland America Line, Norwegian Cruice Lines y Windstar Cruises.
Estas empresas de cruceros confirmaron su interés en hacer escala en Sant Antoni "y ya nos pusieron de manifiesto que, para poder programarlos regularmente, era necesario que nuestro puerto fuera declarado frontera Schengen". Sala recuerda que "como prueba de buena predisposición, se comprometieron a que durante la siguiente temporada y a modo de prueba programarían alguna escala en nuestro puerto. Nosotros, por nuestra parte, deberíamos asegurarles que obtendríamos las autorizaciones pertinentes y que iniciaríamos los trámites para obtener la declaración de puerto Schengen".
El portavoz del Grupo Popular de Sant Antoni ha recordado que, efectivamente, al año siguiente recalaron en el municipio dos cruceros fondeando "pero las autorizaciones no llegaron y tuvimos que apelar a la buena voluntad del Comisario de Policía, que de forma totalmente voluntaria desplazó efectivos para realizar el control de pasaportes, lo que mantuvo en vilo hasta el último momento a navieras y consignatarios". Sala recuerdo que "esto se contradice totalmente con las declaraciones de algún miembro del equipo de Gobierno municipal que asegura que si algún crucero con escala en países no comunitarios quiere fondear en Sant Antoni los agentes se desplazarán sin ningún problema, ya que la decisión queda a la buena voluntad del Comisario de Policía, algo en lo que no pueden basar sus escalas las empresas crucerísticas".
Por otra parte, ha añadido Sala, "la declaración del puerto como frontera Schengen, que parecía un simple y rápido trámite administrativo, resultó mucho más complicado, por lo que tratamos de implicar al resto de instituciones (insular, autonómica y estatal) y empezamos a andar este camino".
Tanto las navieras como los consignatarios reiteraron que, en estas condiciones, no podían programar regularmente escalas de cruceros y, en su lugar, "nos propusieron incluir una excursión a Sant Antoni para sus pasajeros, pero el Ayuntamiento debería proporcionar alguna actividad o entretenimiento a los cruceristas".
"Así se estuvo haciendo durante varios meses pero la estancia en Sant Antoni era muy corta, suponía un gasto para el Ayuntamiento y no cumplía con el objetivo de dinamizar la oferta complementaria de Sant Antoni", ha recalcado Sala.
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