En la reunión, además del alcalde Rafa Ruiz, también han participado el jefe superior de la Policía Nacional en Baleares, Antonio Jarabo; el comisario jefe de Eivissa, José Luis Garau, así como mandos de la Guardia Civil y de la Policía Local.
En la Junta, también se ha establecido potenciar los dispositivos concretos ante el aumento de delitos como robos de vehículos o robos con fuera en establecimientos comerciales, que ya han dado lugar a detenciones de diversos autores. Pese a ligeros repuntes en estas dos tipologías delictivas, según la delegada, durante los primeros tres meses del año las infracciones penales han bajado un 2,27 por ciento en la capital pitiusa.
De cara a la temporada turística, las administraciones se han comprometido a mantener e, incluso, aumentar la coordinación policial, con reuniones semanales entre la Policía Nacional y la Local, "que tan buenos resultados está dando, como se demostró en el reciente desalojo del barrio de Sa Penya", ha destacado la delegada.
"Hay que abordar los problemas derivados de la gran cantidad de turistas para poder ser más eficientes y establecer sinergias entre los cuerpos de seguridad y las administraciones y poder gestionar mejor los problemas que se puedan plantear", ha dicho Ruiz.
Asimismo, el alcalde ha destacado en la reunión la problemática relacionada con el acceso a la vivienda tras detectar varios intentos de ocupación que han podido ser neutralizados gracias a la labor policial.
El edil ha dicho que "es muy importante la colaboración ciudadana inmediata cuando se detecte la ocupación ilegal de viviendas del municipio para avisar a la Policía Local o Nacional".
En la Junta se ha tratado el problema de la prostitución y así, se ha asegurado que se actúa también hacia las personas que demandan estos servicios y "seguiremos siendo contundentes en relación a este tipo de prácticas en la ciudad", han concluido.
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