Tributo a la Cooperativa Agrícola

La Medalla de Oro es el máximo galardón que otorga el Consistorio para reconocer los méritos de personas, entidades y corporaciones en beneficio del municipio.

Tras entregar todos los galardones, el alcalde, Vicent Marí, además de agradecer su labor a todos los premiados aprovechó para destacar el valor de la declaración de las Festes de Maig como Fiesta de Interés Cultural por parte del Consejo Asesor de Cultura Popular y tradicional de las Illes Balears.

En este sentido, Marí destacó que «el Primer Diumenge de Maig es cultura y tradición, historia, flores, carros y carretillas, son agricultores, pero sobre todo, Anem a Maig és Santa Eulària des Riu». «Es cierto que los tiempos cambian, el municipio ha crecido y ha cambiado su manera de vivir y de divertirse, sin embargo, un pueblo no crece solo aumentando se número de habitantes, mejorando su economía o ampliando se sus servicios. Un pueblo también crece con cultura, con respeto, y sobre todo, crece amándolo y apreciándolo», añadió durante su discurso el primer edil.

El galardón a la Cooperativa coincide con los 65 años desde la fundación de la entidad y Marí quiso reconocer su función de impulsor de esta actividad económica, tan importante en el municipio; pero también «hacemos un homenaje a todas las personas que viven y han vivido cuidando la tierra, a todas las personas que siguen la tradición de sus antepasados. En un momento en que, lamentablemente, ser pagès es casi una excentricidad por la dureza del trabajo y las dificultades que conlleva», resumió Vicent Marí. Antes de la entrega, se hizo una pequeña introducción con diferentes imágenes antiguas del pueblo y algunas curiosidades del año de fundación de la Cooperativa, 1951, como los bandos que hacía el alcalde o cómo triunfaba la canción ‘Olé Torero‘, una pieza francesa cantada por el mexicano Luis Mariano.

Premios Xarc

En cuanto a los Premios Xarc, el primero recayó en el estanco de Santa Gertrudis y el galardón lo recogió entre aplausos su actual propietario, Antoni Serra. Este comercio es un ejemplo de negocio centenario y familiar que, a pesar del paso de los años, ha conservado su esencia e imagen características de la Eivissa más tradicional. «Cuatro generaciones de su familia de Can Pep Roig han trabajado un negocio de los pocos que todavía sobreviven al paso del tiempo y que nos ayudan a no desconectar de aquella sociedad rural y auténtica», destacó Marí.

A continuación, llegó el reconocimiento a Adolf Aymat i Abrines, pintor, escultor y ceramista catalán que se estableció en Santa Eulària en 1976. Sobre Aymat, el primer edil agradeció su trabajo con el Consistorio y se felicitó por encontrar el pueblo como «un lugar inspirador». Aymat, que ofreció un jovial discurso de agradecimiento a los presentes, pidió que Santa Eulària acoja el centro dedicado al arte más importante de Eivissa y criticó el estado de las infraestructuras hídricas. «Los perfumes de Eivissa no tendrían que ser los de la depuradora», denunció en clave de humor.

En tercer lugar se premió el trabajo de Francisco Pascual Torres por el desarrollo de Jesús, al ser uno de los promotores de las escuelas o de la consecución del campo de fútbol. Sobre él, el alcalde remarcó que «Jesús debe agradecerle no sólo la dedicación sino la devoción que ha puesto en cada uno de los proyectos que ha apoyado».

También el cuarto premiado ha destacado por su larga trayectoria trabajando por los vecinos de su parroquia, en este caso Puig d'en Valls. José Guasch Cañas ha sido militar de carrera pero por vocación ha mantenido durante décadas una actividad como profesor en el pueblo y ha colaborado para conseguir numerosas mejoras. «Ha sido una pieza clave en el desarrollo de Puig d'en Valls como pueblo con entidad propia, ligando su labor personal y profesional al desarrollo social y cultural de la parroquia», remarcó Marí. El premiado también se extendió en su discurso narrando anécdotas de su dilatada trayectoria, y solicitó más instalaciones en el pueblo porque «sólo podemos jugar al fútbol, no a otros deportes».

Por último, se reconoció con el Premio Xarc al Club Náutico de Santa Eulària por sus 25 años impulsando las actividades náuticas, especialmente entre los más jóvenes, «un trabajo de formación y promoción que ha conseguido que sean muchos los nombres de jóvenes eulariencs que brillan actualmente en las competiciones regionales y nacionales», dijo el presidente de la Corporación Municipal.

Fernando Cardona y Marga Marí condujeron una gala que contó con la colaboración de los músicos de la colla es Broll además de la actuación de la banda ibicenca Solpost.

LA NOTA

Un orgullo para 1.685 socios de la entidad

Los miembros del consejo rector de la Cooperativa y varios expresidentes recogieron el galardón entre los aplausos de los asistentes, entre los que se encontraban diversas autoridades municipales e insulares. El presidente de la entidad, Josep Colomar, se mostró «muy contento» por un reconocimiento «que no esperábamos». «Siempre es de agradecer que reconozcan así tu trabajo», añadió el máximo responsable de una cooperativa que integran 1.685 socios de Eivissa y Formentera.

La Cooperativa fue impulsada por 31 socios en 1951 y se estableció en el local del Sindicato Agrario en Santa Eulària, en el Passeig de S'Alamera. Su objetivo inicial fue la adquisición y venta de productos agrarios y ganaderos para impulsar la producción agrícola y pecuaria de la región.

En el año 1962 la Cooperativa se trasladó a la carretera de Santa Eulària y en 1999, debido al crecimiento tanto en socios como en volumen de negocio la Cooperativa cambió su denominación a ‘Sociedad Cooperativa Agrícola Santa Eulària.' En 2001 se trasladó a su actual ubicación en el punto kilométrico 4 de la carretera de Santa Eulària.