Las obras de es Martell comenzarán en enero y los comerciantes piden que acaben antes del verano

Vecinos y comerciantes ven con buenos ojos el diseño, así como el tamaño del edificio que ocupará la plaza, que será de unos 600 metros de superfície, y celebran que tanto populares como socialistas hayan llegado a un compromiso de no permitir que tenga usos comerciales. También se mostraron «encantados» de que puedan celebrarse actividades en la parte superior del futuro edificio. «La reforma del año pasado fue un primer paso y ahora esperamos que el puerto quede todavía más bonito», afirmaron. No obstante, piden que las obras «molesten lo mínimo posible».

Fuentes del Ayuntamiento de Vila señalaron también que los contactos con la Autoritat Portuària de Balears continúan en diferentes proyectos como la eliminación de las barreras entre el puerto y la ciudad. El equipo municipal también se compromete a convocar el pleno extraordinario sobre la reforma del puerto que la oposición reclama y que, según aseguraron desde el consistorio, «se le pondrá fecha próximamente».

En este pleno se debatirá sobre diferentes aspectos de la reforma del puerto, como la construcción del futuro aparcamiento en la avenida Santa Eulària. La asociación de vecinos y comerciantes preferiría que este parquing fuera subterráneo pero si es semisoterrado piden que «no tenga un gran impacto visual».

«Si se va a peatonalizar el paseo de Vara de Rey y la Plaza del Parque es necesario dar aparcamiento», señalaron fuentes de los comerciantes, quienes confiaron que a partir de ahora «nadie ponga palos en las ruedas y vaya todo para adelante», en referencia a la reforma del puerto.

LA NOTA

El Club Náutico tendrá un aparcamiento el año que viene

Autoritat Portuària de Balears se ha comprometido a habilitar un aparcamiento para el Club Náutico el próximo año. Los vecinos del puerto también piden soluciones al problema de aparcamiento en la zona y piden que, en invierno, los residentes del puerto puedan entrar con sus vehículos. En este sentido, según señalaron, el ayuntamiento se plantea la posibilidad de poner un control en la entrada para permitir el acceso. De momento, el consistorio ha proporcionado permisos para aparcar en la zona azul de La Marina a media docena de vecinos.

Fuentes municipales aseguraron que su objetivo es “sacar los coches de la ciudad” aunque, a la espera de tener el diseño completo del puerto, “todas las posibilidades están encima de la mesa”.