El presupuesto de las obras es de 400.000 euros y el plazo de ejecución de la empresa que consiga la licitación será de un año, sin posibilidad de realizar prórrogas.
El proyecto fue planteado por el anterior equipo de gobierno del Partido Popular, que pretendía reparar este baluarte, ya que era uno de los que no se había podido intervenir. El baluarte de Sant Jordi es uno de los siete de los que dispone el conjunto histórico de Dalt Vila. Es, además, el más antiguo de la ciudad junto al de Sant Jaume. Diseñado por el ingeniero italiano Giovanni Battista Calvi, sus obras comenzaron en el año 1555.
Estas obras de restauración se unen al proyecto de rehabilitación del Castillo y la Almudaina de Eivissa como Parador de Turismo que, con un presupuesto de más de 700.000 euros, fue sacado a licitación por parte del Ministerio de Industria, Energía y Turismo el pasado mes de septiembre. La delicada situación económica de Paradores provocó que este proyecto, que debía acabar en 2011, estuviera paralizado durante cinco años. Ahora un jurado decidirá cuál será el proyecto definitivo para convertir en parador esta antigua instalación militar.
Por otra parte, el Consistorio ha elaborado un amplio informe con toda una serie de pequeños desperfectos registrados en Dalt Vila para comenzar antes de que acabe el año una campaña de pequeñas reparaciones que ayuden al mantenimiento en las mejores condiciones posibles del recinto declarado Patrimonio de la Humanidad.
Desde el Consorci Patrimoni también se sigue trabajando para poner en marcha cuanto la antes la reforma de la calle Antoni Costa Ramón, antiguamente conocida como carrer Murada. El proyecto de mejora de esta calle es el primero en ponerse en marcha de las diferentes vías que se prevé arreglar durante esta legislatura.
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