El artista Pep Monerris ‘Bagaix’ en Can Tixedó junto a algunos de sus cuadros. Foto: DANIEL ESPINOSA

Pep Monerris ‘Bagaix' expone hasta el próximo 10 de octubre en el bar restaurante Can Tixedó de Buscastell Citizen Mantronix, una nueva colección de 19 obras con las que da una vuelta de tuerca más en su idea de reflexionar sobre la influencia que tienen las nuevas tecnologías en nuestros días a través de sus obras de arte.

Concretamente, Monerris ha poblado las paredes de este bar con cuadros en color crema, de distintos tamaños y realizados en tres dimensiones, cuya mayor virtud es la buena sensación que dejan en el espectador. Más allá de lo que el autor haya perseguido con su creación y si consiguen hacer reflexionar «sobre las nuevas tecnologías y los retos sociales frente a los viejos sistemas obsoletos» lo cierto es que su elaboración y su nivel de detalle es magnífico.

Para la elaboración de sus obras, este artista, creador en los años 80 del logotipo de Space y de carteles de discotecas que ya son historia como Ku (actual Privilege), Tito's o Angels, ha empleado fundamentalmente dos tipos de marmolina (polvo de mármol), placas y elementos informáticos de desechos de ordenadores prestados por la empresa BEEP, arena negra de Cala Boix y como base, puertas de armarios que iban a tirar un hotel que renovaba mobiliario. Además, prácticamente todos los cuadros están acompañados con una cita o con versos de canciones de artistas y grupos como Patty Smith o King Crimson.

Citizen Mantronix forma parte de la serie que Monerris bautizó como Tronix y cuya primera parte se pudo ver en 2012 cuando el artista tuvo el honor de clausurar con su exposición Positronix la desaparecida galería Vía2, situada en la calle Vía Púnica de Vila. «Siempre me ha gustado que las obras de arte ayuden a reflexionar y más ahora con el contexto en el que vivimos, y por eso intento que cada uno de mis cuadros sirva para que nos planteemos cómo somos y de dónde venimos y la necesidad de crear un hombre más implicado con su barrio, con su ciudad y con el mundo», concluyó Pep Monerris ‘Bagaix'.