Una pescadera muestra una caja de ‘raors’ en una imagen tomada ayer en el Mercat Nou. | Toni Escobar

El temporal con que se ha iniciado el mes de septiembre ha mermado notablemente la captura de raors que han llegado a los mercados de Eivissa. Las lluvias torrenciales y las mangas de agua del martes y miércoles amedrentaron por igual a peces y pescadores, reduciendo a la mitad la cantidad de ejemplares, según explicaron algunos comerciantes del Mercat Nou de Vila.

Así, el pescadero José Moya señaló que el primer día de campaña del año pasado le llegaron 19 kilos de raors entre dos embarcaciones y que, este año, solo contaba con una embarcación que apenas le sirvió cinco kilos.

Entre los motivos de este descenso, Moya destacó las adversas condiciones meteorológicas de estos primero días de campaña –«con el agua tan movida no pican», dijo– pero añadió otro factor, como el menguante número de embarcaciones profesionales: «Cada vez hay menos gente que se dedique, y el raor está quedando para los de la pesca recreativa, que se vuelcan y en dos o tres días lo pescan todo».

‘Raors' de otras aguas

Por otra parte, en los últimos años algunos comerciantes han optado por adquirir raors de otros orígenes. Es el caso de la pescadera Rita Ros, que recibe esta apreciada variedad de las aguas de Tarragona. Sin embargo, advierte que «algunos lo traen de Egipto o Senegal, es un pescado que se parece físicamente pero el gusto no tiene nada que ver», comentó Ros.

«Entre Girona y Almería se encuentra el mismo pescado que se pesca aquí, con la diferencia de la veda y el precio», manifestó la pescadera. Cabe recordar que en Eivissa no existe subasta de pescado y la Cofradía fija el precio del pescado (74,90 euros en el caso del raor). En cambio, cuando la captura procede de embarcaciones de la Península, los precios son variables. Así, Ros declaró que el precio del raor tarraconense «ha oscilado entre los 55 euros/kilo de ahora y los 60 y pico». «Además, allí no se aplica ninguna veda y así puedo tener raor todo el año», añadió.

En cambio, otros muchas pescaderías del Mercat Nou han prescindido de esta especie: «Hace tiempo que no vendo raors, este año ni me han ofrecido ni tengo demasiado interés en ello, el que lo ha pescado se lo habrá quedado para sí mismo», comenta la pescadera Gema Chorat.

Otro pescadero, Daniel Ferrer, también indica que hace muchos años que no tiene raors en su puesto: «Hace 30 años sí que tenía, pero ahora no, que de recreo no se puede vender y casi todo se lo llevan pescadores no profesionales».