La responsable de Turisme de la máxima institución insular explicó, en un pleno extraordinario convocado para la ocasión, que la intención del Govern es repartir entre los diferentes consells 5,3 millones en 2015, 8,3 millones en 2016 y 11,3 millones en 2017. Unas cantidades que Ferrer considera «de mínimos» que pueden aumentar si las cuentas de la Comunitat mejoran, si algún Consell no quisiera asumirá las competencias o si la deuda de la Agencia de Turisme Balear (ATB) disminuye.
Variables
De los 5,3 millones para el próximo año, 2,4 millones (el 45%) se dividirá entre los cuatro consells a partes iguales, es decir, 600.000 euros para cada uno. El resto, se reparte según una serie de variables: el 30% según el número de plazas hoteleras de cada isla (la oferta), el 50% según la población estacional (la demanda) y el 20% restante según los afiliados a la Seguridad Social que genera la actividad turística. Unos datos que la consellera Ferrer considera «reales y no manipulables».
La consellera de Turisme de Eivissa destacó que esta transferencia no está condicionada, por lo que cada Consell podrá utilizar el dinero recibido en promocionar la isla como más le convenga. Además, Ferrer avanzó que en la próxima reunión de la comisión mixta sobre el traspaso de competencias en promoción turística propondrán mejorar la cantidad a repartir. Entre los conceptos que el Consell d'Eivissa pondrá encima de la mesa están el revisar la cantidad fija a medida que aumente la variable para mantener la proporcionalidad entre islas o que haya un factor corrector en cuanto a recursos humanos en favor de las islas que asuman las competencias. «La situación económica es la que es y se reparte lo que hay, a medida que la situación mejore también lo hará la dotación», aseguró Ferrer.
Síndrome de Estocolmo
La consellera de PSOE-Pacte, Pepa Marí, acusó a Ferrer de tener el síndrome de Estocolmo por utilizar «los mismos argumentos que quien la ha secuestrado, que es el Govern». Los progresistas reclamaron al Consell que «no acepte» la propuesta de traspaso de competencias en promoción turística, ya que es «un insulto a nuestra isla y a esta casa», según Pepa Marí.
La consellera progresista resaltó que el dinero propuesto para los consells es sólo una quinta parte del presupuesto total de la Agencia de Turismo Balear.
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