Alguno de los asistentes de la fiesta ilegal que tuvo lugar en el polvorín militar de Santa Gertrudis.

El Ayuntamiento de Santa Eulària sancionará con 75.000 euros a los promotores de una fiesta ilegal que se celebró en es Polvorí de Santa Gertrudis los días 13 y 14 de julio, en la que se congregaron más de mil personas.

El Consistorio considera que se trata de una infracción «muy grave» después de acreditar que realizaron «una actividad no permanente mayor, para la que no se había pedido licencia».

El artículo 104.2 de la ley 7/3013 de Régimen Jurídico de Instalación, Acceso y Ejercicio de la actividad en Balears, se detalla que estas infracciones se pueden multar con cantidades que oscilan entre los 10.001 y los 100.000 euros. No obstante, desde los servicios jurídicos municipales se consideró que en este caso procedía una sanción más elevada «debido a las dimensiones y amplio dispositivo organizativo del evento». Además, destacaron que no se había acreditado la existencia de medidas de seguridad «suficientes» para una celebración de este tipo dentro de una antigua instalación militar subterránea, «no condicionada para tal efecto y en una zona boscosa en plena temporada de alto riesgo de incendio forestal».

Aparte de la sanción económica, también se ha decretado la inhabilitación de tres años «para el ejercicio de la profesión en relación a la organización y explotación de este tipo de eventos para los administradores de la propiedad».

La Policía Local de Santa Eulària detalló que la fiesta estaba «plenamente organizada», con vehículos lanzadera que llevaban a los asistentes desde una explanada cercana al hipódromo de Sant Rafel hasta es Polvorí.

El hecho de que permitieran el traslado de un mínimo de 500 personas demuestra que se trataba de una fiesta privada. Además, en el expediente acreditan que el número de asistentes superó con creces las mil personas.