Un momento del curso de cuidados paliativos perinatales impartido por la doctora Ana Martín Ancel.

El hospital de Can Misses ha acogido durante dos días un curso de cuidados paliativos perinatales dirigido a los profesionales de las áreas de maternidad, ginecología y pediatría. Las jornadas fueron dirigidas por la especialista en Medicina Perinatal, la doctora Ana Martín Ancel, del Servicio de Neonatología del Hospital Sant Joan de Déu de Barcelona, que destacó la importancia de acompañar a las familias que saben que su bebé tiene un alto riesgo de morir antes o inmediatamente después de nacer.

La primera parte del curso, dirigida a 30 profesionales, se celebró el jueves bajo el título ‘Cuidados paliativos perinatales: el final de la vida cuando la vida empieza', mientras que ayer se llevó a cabo la segunda parte que trató sobre la reanimación cardio-pulmonar nonatal.

La doctora explicó que en estos casos es tan importante aportar todos los recursos de la medicina como «cuidar los aspectos más humanos». Para ello, aconsejó establecer un buen diagnóstico del paciente, aplicar el tratamiento si lo hay y no abandonar a los padres en estos momentos «tan dolorosos y trágicos». Según la doctora, es importante ayudar a las familias a planificar y hacer frente al resto del embarazo, así como el momento del parto.

La doctora recomendó dejar a los padres elegir como quieren vivir este momento como «permitir que cojan a los bebés en brazos, hacerles fotos bautizarlo o que entren más familiares a conocer al niño».

Martín lamentó que existe un «rechazo social» hacia las madres que deciden no abortar a los niños con alguna malformación. «Los padres sienten una gran presión social cuando la gente tendría que ser libre de acompañar a su hijo como quiera», apuntó.

El jefe de Pediatría de Can Misses, Bartolomé Bonet, recordó que se registran en Eivissa alrededor de diez casos de muertes fetales y neonatales al año.