Imagen del vial peatonal en el que han colaborado los vecinos haciendo sugerencias como el tipo de piedra o el color.

Para los vecinos de Forada (Buscastell) ayer fue un día muy especial porque por fin, después de más de 15 años pidiéndolo, estrenaron el vial peatonal (o acera, como comentaban algunos vecinos) que les comunica desde el núcleo urbano a las instalaciones deportivas y el centro cívico sin tener que caminar por una carretera sin arcén.

Con 390 metros de longitud y dos metros de ancho, los vecinos señalaron ayer la importancia de este vial peatonal para el pueblo: «Para nosotros esto supone mucho porque llevamos más de 15 años pidiendo que se haga. Los niños de la escuela de Buscatell vienen a hacer sus actividades deportivas y los mayores a reunirse en el centro cívico. Antes para poder llegar tenían que caminar por la acera porque no había arcén; era un peligro», explicó Isabel Prats, presidenta de la Asociación de Vecinos de Forada, quien afirmó que el retraso en la ejecución de esta obra lo han vivido «yendo y viniendo del Consell; hemos tenido entrevistas con el Consell de todos los colores políticos. Todos nos decían y nos prometían y al final no hacían nada».

Prats destacó que entre los motivos de los políticos para no ejecutar este vial peatonal se encontraban «la falta de presupuesto o bien se presentaba un proyecto y el que llegaba más tarde lo tiraba para atrás».

Obra demandada

El presidente del Consell d'Eivissa, Vicent Serra, inauguró la obra junto con la consellera de Mobilitat, Pepa Costa; el conseller d' Agricultura, Antoni Marí, Carraca, y la alcaldesa de Sant Antoni, Pepita Gutiérrez. Serra destacó que si bien se trata de una «obra pequeña» es el ejemplo de cómo deben trabajar las instituciones «en colaboración con los vecinos», pues según destacó se han incorporado sugerencias al vial que habían hecho los ciudadanos de Forada, como el color o el tipo de piedra. «Es una obra muy demandada por el Ayuntamiento de Sant Antoni desde hace demasiados años», explicó para añadir que a finales de 2006 (en la legislatura de Pere Palau) se hizo un proyecto que no llegó a ejecutarse: «Este proyecto en la última legislatura no se consolidó, se tiró para atrás, y teníamos claro que era una prioridad porque era una necesidad no sólo por la demanda de los vecinos sino por la seguridad del pueblo», explicó el presidente de la máxima institución insular, quien destacó la «insistencia» del Ayuntamiento de Sant Antoni para llevar adelante este proyecto.