El Ayuntamiento de Eivissa ha anunciado que en 2014 congelará las tasas y precios públicos y ha avanzado que los impuestos que se revisen lo harán a la baja. Así lo ha afirmado la alcaldesa, Pilar Marí, quien ha dicho que el Ayuntamiento propondrá al Pleno de la Corporación municipal ajustes a la baja de determinados impuestos «en el margen de maniobra que nos queda» para no aumentar así la presión fiscal de los ciudadanos.
Marí ha detallado que, en el marco de la actualización de las ordenanzas fiscales, el equipo de Gobierno ha decidido la congelación de las tasas fiscales municipales para el ejercicio 2014 y la bajada de los tipos impositivos del Impuesto sobre Construcciones, Instalaciones y Obras y el Impuesto sobre el Incremento del Valor de los Terrenos de Naturaleza Urbana.
El Impuesto de Construcción, Instalaciones y Obras experimentará una reducción del 5% aproximadamente, ya que el tipo pasará del 4 al 3,8%. En el caso del Impuesto sobre el incremento del valor de los terrenos de naturaleza urbana, el tipo impositivo se reduce del 29 al 27%. De este modo, las plusvalías sufrirán una bajada del 7%, según han confirmado fuentes municipales.
Desde el Consistorio han recordado que el Impuesto de Bienes Inmuebles, IBI, mantiene el tipo de gravamen en el 0,82% y establece nuevos porcentajes de bonificación a familias numerosas atendiendo al valor catastral de la propiedad. La ordenanza reguladora del IBI para 2014 recogerá así una bonificación del 65% para aquellas familias numerosas cuyos inmuebles tengan un valor catastral igual o superior a 120.001 euros y que las anteriores ordenanzas fiscales no contemplaban.
Marí ha querido destacar el «gran esfuerzo» que está llevando a cabo la administración local para no repercutir en las economías de las familias del municipio los gastos derivados de «malas gestiones anteriores».
La alcaldesa se ha referido a una sentencia que obliga a pagar unos 700.000 euros adicionales por una expropiación de la plaza de toros o la deuda de las sociedades municipales Imvisa e Itusa que asciende a 700.000 euros.
La primera edil ha asegurado que «esta situación nos ha impedido aplicar una bajada general de todos los tributos municipales» y ha anunciado que seguirán intentándolo en el próximo ejercicio.
Marí ha destacado además que el Ayuntamiento asumirá el incremento de los costes derivados de la nueva contrata de limpieza y recogida de residuos para que el nuevo contrato no repercuta en los recibos de los contribuyentes.
Asimismo, ha dicho que el Ayuntamiento mantendrá su nivel de inversión y la mejora de los servicios públicos, pero sin recurrir al endeudamiento o a la subida de impuestos.
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Esto es un buen comienzo.