El Consell de Formentera ha recordado que, con la llegada del nuevo año, los ganaderos de la isla están obligados a renovar sus cartillas con el objetivo de garantizar y planificar los controles sanitarios que deben realizar a animales como los cerdos, las ovejas o las gallinas, entre otros.
Según han informado, en enero y febrero se abrirá el periodo de declaración obligatoria del censo ganadero, tanto para las personas que comercializan con los animales, como para quienes los crían para el propio consumo.
Desde la institución han recordado que, para la renovación de las cartillas, los interesados deberán dirigirse al área de Agricultura del Consell con el Libro de Registro de Explotación. En él, se dejará constancia del balance de reproducciones de sus animales.
Entre otras cuestiones, en el Libro se reflejan las bajas de las crías que se llevan al matadero o a otras explotaciones. El Consell ha informado que si alguna finca no dispone del Registro, debe solicitar un ejemplar, además de contar previamente con la guía elaborada por la veterinaria del Consell, en la que se informa sobre calificaciones sanitarias, entre otros asuntos.
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