Después del traspié que casi deja a la institución sin el acceso a este crédito porque envió la petición en papel cuando debía hacerlo de forma telemática, el Consell aprobó ayer por la vía de urgencia solicitar la operación que permitirá que a finales de mayo los proveedores reciban por transferencia el pago de su facturas.
Por su parte, el grupo PSOE-Pacte votó en contra porque no está de acuerdo en que el Consell se endeude «cuando esos seis millones de euros podrían ser pagados por el Govern balear» como parte de la deuda que mantiene con la institución y que asciende a 38 millones de euros. «Qué le supone al Govern seis millones de euros con un presupuesto de 3.800, nada», aseguró ayer la consellera progresista Patricia Abascal.
Para el conseller de Economía, Álex Minchiotti, «no vale decir que el plan de ajuste consiste en que el Govern pague la totalidad de la deuda, porque eso, dada la situación en la que se encuentra provocada por un partido que no es el nuestro, no es realista». «Si lo hiciésemos así, como el Govern no puede hacer frente a la totalidad de la deuda, incumpliríamos el plan de ajuste y eso a partir de ahora trae sanciones inmediatas, que son el 0,2% de nuestro presupuesto, es decir, de 81 millones, 162.000 euros para ser exactos», destacó.
Asimismo, Minchiotti indicó que el Consell debe responder a «un plan de ajuste no de vaibilidad, que está asegurada en los presupuestos de 2012». «Lo digo por otros comentarios alarmistas que se están sintiendo», señaló.
Abascal se quejó de que el PP «lleva diez meses gobernando y su gran triunfo ha sido pedir diez millones de euros en préstamos» y preguntó: «¿Quién está cuestionando la viabilidad del Consell? Nosotros no, gente de su partido», respondió la consellera a Minchiotti, quien recordó, por su parte, que en la anterior legislatura también se pidió un crédito de 5,5 millones para pagar a sus proveedores.
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