El conseller no quiso hacer ayer ningún comentario sobre la salida de Reynés de su Conselleria, pero sí habló la portavoz de los populares en el Parlament, Mabel Cabrer, quien señaló que su nombramiento había sido «estéticamente incorrecto».
Malestar en el PP
El nombramiento de Reynés, defendido a capa y espada por Carlos Delgado como una muestra de austeridad, había causado un profundo malestar en el PP, incluso en sectores considerados cercanos al conseller de Turisme. Muchos en el PP censuraron la decisión de Delgado de contratar a su novia ya que consideraban que esta contratación echaba por tierra todo el discurso del PP en contra del «enchufismo» que en su opinión practicó el Pacte en la anterior legislatura. No obstante, todos los representantes del PP que hablaron en público defendieron la actuación de Delgado.
En las filas de los populares tampoco se entendía cómo era posible que el president del Govern, José Ramón Bauzá, permitía esta contratación después de haber obligado a que sus consellers a firmar un código de conducta en el que se reprobaban decisiones como la de Delgado.
La oposición también se había mostrado muy crítica con esta contratación. El portavoz adjunto del PSIB-PSOE en el Parlament, Vicenç Thomàs, calificó ayer de «indecente» la actuación del conseller.
Despidos
Consideró «muy grave» que el conseller contrate a su novia mientras el Govern se dedica a despedir personal interino.
El portavoz del PSM-IV-ExM, Biel Barceló, destacó que tanto el portavoz del Govern como el propio conseller de Turisme, Carlos Delgado, salieron a defender la contratación de la novia de Delgado. Aseguró que la decisión de dar marcha atrás en esta contratación era una buena noticia, pero aún así afirmó que el Govern debe explicar a qué se debe la rectificación.
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