Antonio Ramos es un catalán que vive a 20 kilómetros de Barcelona y que ha venido a pasar unos días a Eivissa y que está encantado con algunas de sus calas y con Sant Antoni.
Él fue uno de los tantos turistas que disfrutaron ayer con la multitud de actividades que se organizaron en su honor en toda la Isla, como el tren turístico que durante cerca de hora y media recorrió lugares emblemáticos de Sant Antoni, haciendo parada para degustar productos y vinos típicos en las bodegas Can Rich y sangría con buñuelos en el Aquarium de Cala Gració.
Esta iniciativa fue todo un éxito ya que, según Ignacio, creador de la empresa Sant Antonio Express, que se puso de acuerdo con el consistorio para hacer esta ruta, «cada viaje iba lleno hasta la bandera con franceses, ingleses, alemanes y australianos entusiasmados con el recorrido».
También gustó mucho la caravana de coches antiguos de Veteran Car Club de España que llegó durante la mañana a la Iglesia de Sant Josep. La colección de vehículos fue tal que los turistas se quedaron prendados con el Rolls Royce, el Hispano Suiza, el Citroen, el Berlier o el Cadillac y con sus dueños, que aparecieron, además, vestidos conforme a la época del vehículo.
Pero de entre todos ellos los turistas se quedaban con uno sin dudarlo: el Rolls Royce Phanton 2, descapotable de cuatro puertas, totalmente original, de 1930, propiedad de Agustín Pastor y Fernando Salvador, quienes trajeron su tesoro desde Córdoba a Denia en un camión, y luego en ferry.
Otro de los lugares donde se vivió también con intensidad el Día del Turista fue en Santa Eulária. En él, se aprovechó el río que le diferencia de Balears, para organizar una ruta guiada gratuita que recorrió lugares como el Pou de Baix, sa Punta d'en Castelló, el pont vell del municipio y sus leyendas sobre su origen demoniaco, el Centre d'Interpretació de Can Planetes, y el Puig de Missa, emblema turístico de la localidad.
Mientras en Vila se organizó durante todo el día una jornada de puertas abiertas en los principales museos y espacios de la ciudad como los baluartes de Sant Jaume y Sant Pere, la sala capitular del Ayuntamiento, la Casa Broner y el Centro de Interpretación de Medina Yabisa. Algo que fue aprovechado por muchos turistas, como Juana y Julián, «para descubrir lugares increíbles que jamás nos hubiéramos imaginado que estuvieran en Eivissa».
Los más fieles
Además, como todos los años el Consell d'Eivissa y el de Formentera han entregado unas placas y unos regalos a algunos turistas que llevan acudiendo a las dos islas desde hace más de 25 años.
Así por ejemplo, el president del Consell d'Eivissa, Vicent Serra, se reunió con 19 de ellos, entre los que llamaba la atención, los británicos George y Stella Noddings, que con 38 años de visitas ininterrumpidas.
Por su parte, en Formentera se ha reconocido a cinco de ellos, destacando Pilar Mateo Payés, quien lleva 46 años visitando la menor de las Pitiüses.
1 comentario
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A mí, también me gusta Ibiza (sobre todo fuera de temporada) Es maravillosa, estoy deseando volver. Muy chulo el artículo.....