AENA gastará un millón de euros en insonorizar un millar de inmuebles cercanos al aeropuerto

Más viviendas
El censo de inmuebles (mayoritariamente viviendas, pero también se ha pedido información a los ayuntamientos sobre posibles instalaciones municipales que pudieran verse afectados por el ruido excesivo de los aviones) recoge unas 1.100 viviendas con derecho a solicitar la insonorización, 749 en Sant Josep y 361 en Vila. Según se informó anteriormente, el plazo para ultimar todas las intervenciones de aislamiento acaba el año próximo.
«Sin embargo, los datos actuales de las viviendas afectadas (...) no son fijos y se van revisando continuamente, por lo que los vecinos de las zonas afectadas pueden seguir solicitando actuaciones de aislamiento y haciendo llegar la documentación solicitada», apuntaron desde el organismo dependiente de Fomento.
De momento, los trabajos de aislamiento acústico se están ejecutando ya en 86 viviendas, aunque se prevé realizar más mediciones acústicas en nuevas viviendas más adelante, una vez se compruebe la documentación aportada por los solicitantes.
La Declaración de Impacto Ambiental del proyecto 'Actuaciones en el Aeropuerto de Eivissa' forma parte de las exigencias fijadas en la resolución del 1 de septiembre de 2009 de la Secretaría de Estado de Cambio Climático.

Soportar más de 55 decibelios
Según se recogía en la orden de septiembre de 2009 en la que se fijaba el Plan de Insonorización, los trabajos se preveía que afectaran a unas 720 viviendas.
Se destacaba especialmente la necesidad de actuar en las casas expuestas a más de 65 decibelios en horario diurno, unas 380, o las que perciben ruidos de más de 55 decibelios entre las 23,00 y las 07,00 horas. En este caso, las viviendas incluidas en esta franja eran 570 pero con la puesta en funcionamiento de la pista de rodadura podrían alcanzar las 690.
Estas casas se encuentran ubicadas en Sant Josep, al este del aeropuerto, de forma diseminada en el entorno de la pista y de forma concentrada en la franja de Platja d'en Bossa.
En horario nocturno, las molestias se incrementan y las viviendas afectadas se sitúan también en el término municipal de Vila y a aquellas casas situadas muy cerca del aeropuerto, tanto al norte como al sur de las instalaciones.
La condición que se ponía para acceder a la insonorización es que las viviendas dispongan de licencia de obra con fecha anterior a la publicación de la Declaración de Impacto Ambiental.