Fugaz, bella y muy profesional, la modelo rusa y novia del futbolista Cristiano Ronaldo, Irina Shayk, participó recientemente en una sesión de fotos por las calles de Eivissa para una de las firmas de las que es imagen. Coqueta como ella sola (en las pausas ella misma se retocaba el maquillaje) y haciendo alarde de su desenvoltura ante las cámaras, no dudó en dar lo mejor de sí misma para lucir las tendencias que se llevarán la temporada que viene.
Si bien Irina siempre ha destacado por su trayectoria profesional a pesar de ser muy joven (ha sido imagen de Intimissimi entre 2007 y 2009, ha trabajado para la prestigiosa Victoria's Secret, fue chica Guess y modelo de bikinis para Sports Illustrated, entre otras campañas), su imagen se hizo más pública que nunca cuando aparecieron en mayo de este año las primeras imágenes que la relacionaban sentimentalmente con el futbolista Cristiano Ronaldo y en las que compartían gestos de cariño durante las vacaciones que disfrutó esta pareja de bellezas en Córcega previas al Mundia.
Desde entonces, las noticias sobre su vida sentimental han predominado más que las que tratan sobre sus proyectos profesionales, sobre todo cuando el futbolista portugués hizo pública su paternidad en agosto antes de comunicárselo personalmente a su novia, pues ésta afirmó en una red social que se enteró por los medios de comunicación. A pesar del disgusto inicial, la modelo afirmó más tarde que continuaba su relación con el futbolista portugués. Tanto, que en agosto hicieron su primera aparición oficial en un partido de básquet y, desde verano, se han vuelto más inseparables que nunca.
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