Los apartamentos turísticos legalmente establecidos en las Pitiüses han cerrado la temporada turística con un sabor agridulce puesto que han conseguido mejorar su cifra absoluta de clientes pero han perdido negocio puesto que les han contratado menos noches de estancia.

Según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), y teniendo en cuenta que los registros de mayo no están accesibles por Internet, este verano la planta de apartamentos turísticos de Eivissa y Formentera ha contado con 214.000 clientes. Tanto en términos absolutos (3.700 más) como en relativos (más un 1,75%), el aumento es poco significativo pero, teniendo en cuenta el contexto económico, posiblemente sean uno de los pocos negocios ligados al turismo que puede sacar pecho y decir que mantiene su tirón.

Lamentablemente, hay que reconocer que tras ese destello optimista, las estancias contratadas que son lo que, en definitiva, determina si se hace más o menos negocio, han caído. Entre junio y octubre se concretaron 1,62 millones de pernoctaciones, casi 179.000 menos que en el mismo periodo del año precedente. En este caso, el descenso porcentualmente sí que es significativo puesto que roza el 10%.

Acortar la estancia

Los datos que presenta el INE para las Pitiüses reflejan que el sector de los apartamentos turísticos sigue la senda que han recorrido los establecimientos hoteleros en el sentido de un acortamiento de las estancias medias.

En este caso la reducción es más significativa que en el caso de los hoteleros dado que esta se concreta en un día menos. El año pasado, la estancia media era de 8,55 días, mientras que en la presente temporada esta se ha recortado hasta los 7,58 jornadas de media.

Siguiendo con los datos negativos, el empleo generado por esta actividad ha caído de forma considerable. De media, los apartamentos turísticas han empleado a 1.356 personas al mes, cifra que el pasado ejercicio se elevaba hasta las 1.471, unas 115 más.

El último mes de la temporada, los apartamentos de las Pitiüses registraron menos de 10.000 usuarios y 72.000 pernoctaciones. Estas cifras son netamente inferiores a las registradas el pasado ejercicio, cuando octubre acabó con 12.500 clientes registrados y 116.000 estancias.

Igual de elocuente es la duración media de los contratos, con 7,42 jornadas por las 9,26 de 2008. La ocupación media por apartamento se situó en un 27,25% y permanecieron abiertos algo más de 10.100 alojamientos, 3.000 menos que un año antes.