La Autoritat Portuària de Balears comenzó hace un mes la reestructuración de la zona de aparcamiento de la zona situada a espaldas de la Estación Marítima de la Savina, el puerto de Formentera, para optimizar y cambiar los usos del espacio disponible que hasta la fecha sólo podían disfrutar las compañías de alquiler de vehículos.

Ports no ha presentado públicamente el alcance de las obras por lo que los usuarios no pueden pronunciarse al respecto aunque, por descontado, se quejan de las dificultades y problemas de acceso a la zona portuaria remarcando, sin distinción «y eso siempre será para que los rent a car tengan más espacio» que es una de las quejas ancestrales de los formenterenses; las empresas de alquiler de vehículos, sean coches o motos son las que copan el espacio inmediato a la estación marítima y los residentes claman, desde hace décadas, en contra de una situación que choca con las necesidades de los formenterenses y supone una clara discriminación.

Por el momento y de forma provisional mientras se realizan las obras, los taxistas han vuelto a ocupar la que antes era su posición en la antigua terminal, frente a los barcos y no a su espalda, y los autobuses, dependiendo de si son de línea, de excursiones u otras circunstancias como traslado de deportistas de la isla a Eivissa, se ubican en lugares distintos y muchas veces dependiendo del día y el momento.

Debido a que la Autoritat Portuària de Balears no ha explicado públicamente a los formenterenses qué se está haciendo, ni cuánto se tardará en finalizar los trabajos en marcha, en los carteles informativos sólo se señala que la empresa responsable es Dragados, el malestar entre los usuarios sigue creciendo sin que la mayoría de ellos se atrevan a protestar para no verse perjudicados.