La implantación de nuevos servicios de las Compañías de Bajo Coste (CBC) en el aeropuerto de Eivissa está logrando aliviar el recorte de plazas y la bajada de la demanda en los servicios de transporte en avión a través de los vuelos charter y en las líneas regulares de las aerolíneas tradicionales, respectivamente. Así se desprende de los últimos datos del informe de las 'low cost' publicado por el Instituto de Estudios Turísticos (IET), dependiente del Ministerio de Industria y Turismo.

Según los datos de la encuesta hasta junio, basada en los datos de Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA), la entrada de pasajeros al aeropuerto de es Codolar a través de aerolíneas tradicionales y CBC fue de 410.000 usuarios, una reducción de sólo un 0,2% o, lo que es lo mismo, menos de 900 pasajeros.

Este dato llama poderosamente la atención por ser un recorte de tan sólo dos décimas cuando el total de llegadas presentó un 5% de bajada respecto a los datos de la primera mitad de 2008, según las estadísticas de AENA.

La explicación de este fenómeno es que las compañías charter, a pesar de seguir copando la mitad del tráfico acumulado en es Codolar en la primera mitad del año, han perdido fuelle. No es un dato sorprendente puesto que los principales operadores turísticos ya habían anunciado que reducirían capacidades (menos vuelos) y que, en todo caso, apostarían más por reservar asientos en las líneas regulares.

Repunte de las CBC

De forma correlativa a este proceso, el análisis específico de los datos de empresas convencionales y las de bajo coste muestra cómo las primeras van perdiendo terreno de forma acelerada respecto a las segundas.

Las 'low cost' gestionaron un volumen de pasajeros en el primer semestre del año de 224.500 personas, 53.500 más que en el mismo periodo del año precedente.

Eso sí, hay que tener en cuenta que el progreso de las CBC se debe, de forma casi exclusiva, a la entrada en el mercado pitiuso de Ryanair. La firma irlandesa ha gestionado entre enero y junio la llegada de 57.800 usuarios.

Si se toma como referencia únicamente el mes de junio, el progreso de las 'aerolíneas baratas' es algo más discreto. Si en el acumulado del año su crecimiento era del 31,3% (el más elevado entre los 10 aeropuertos con más movimiento de CBC en España), en junio se creció un 17,5% hasta alcanzar los 118.500 usuarios.

Cuando se dirige el foco a los datos de las aerolíneas tradicionales, el comportamiento que se observa es totalmente contrario. Se considere únicamente el mes pasado o se tome todo el primer semestre del año, las caídas son superiores al 20% y las empresas aéreas 'standard' corroboran que han dejado de ser la vía principal de desplazamiento desde y hacia las Pitiüses por medios aéreos.

En el conjunto del año, las compañías tradicionales han sumado 185.600 clientes, un 22,6% menos. Esta situación estaría motivada por los problemas de estas firmas para competir por precio, pero también por dificultades importantes que atraviesan compañías importantes como Spanair y que les han llevado a reducir rutas y frecuencias.

En cuanto a los datos de junio, la caída es proporcionalmente mayor y se sitúa en el 24,5% o, dicho de otra forma, se ha perdido uno de cada cuatro clientes que se tenían en el mismo mes de 2008. En total, durante el sexto mes gestionaron algo menos de 103.500 pasajeros.