Propietarios de bares de Vila se han quejado estos días de la presencia de la Policía Local en sus bares de copas anunciándoles que el horario de cierre se había superado y que estaban incumpliendo la nueva normativa de cierres. En este sentido, uno de los propietarios afectados, aseguró que con esta nueva normativa su bar sólo puede trabajar dos horas por día (entre que llega la gente y el horario de clausura) y que si encima se vé obligado a cerrar las puertas media hora antes, tendría qie comenzar a despedir empleados debido a que, de esta forma, no puede mantener al personal.
Desde el Ayuntamiento de Eivissa aseguraron al respecto que la Policía Local se encuentra haciendo una ronda nocturna por los bares de la ciudad para «recordar cuáles son las obligaciones y horarios que tienen, que se consensuaron con todos los ayuntamientos, y que en caso de los bares, restaurantes, cafeterías y similiares tienen que cerrar a las 3,00 horas, los días de semana, y a las 3,30 horas, los viernes, sábados y vísperas festivos». Fuentes municipales aseguraron que esta campaña de recordatorio es previa a otra en la que podrán comenzar a imponer sanciones. «En verano se está más constante con el tema pero ahora, como falta cada vez menos para la llegada de la Semana Santa y de principios de temporada, se les va avisando sobre las obligaciones que tienen que cumplir», explicó una portavoz.
Por su parte, uno de los propietarios de establecimientos en desacuerdo con la nueva norma recordó que esta normativa recorta su horario de trabajo, en épocas de crisis, y en el que los impuestos municipales no han bajado y se hacen imposibles de afrontar si no puede mantener abierto el establecimiento.
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