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Aeropuertos españoles y navegación aérea (AENA) aseguró ayer que el aeródromo de Madrid-Barajas funcionó durante toda la jornada del domingo con «total normalidad» y mantuvo todas sus pistas de despegue y aterrizaje abiertas, aunque con una demora media de 43 minutos en todas las operaciones de la Terminal 4.

Los problemas de los últimos días por la falta de controladores aéreos y la huelga de celo de los pilotos de Iberia, produjo retrasos este fin de semana también en el aeropuerto de Eivissa. En este sentido, AENA registró una demora de diez horas en un vuelo de Iberia que debía despegar el sábado a las 13,30 horas con destino Madrid y que terminó saliendo del aeropuerto de Eivissa a las 22,55 horas. En esta demora se vio perjudicado el equipo de fútbol La Peña Deportiva de Santa Eulària, que debía hacer escala en Madrid para jugar hoy con el Osasuna B en Pamplona, encuentro que se suspendió a causa de este retraso.

Por otra parte, Iberia se vio obligada a contratar ayer ocho vuelos con tres compañías para poder reubicar a los pasajeros afectados, además tuvo que trasladar a 3.000 personas que habían sufrido pérdidas de conexión a diferentes hoteles. Sin embargo y a pesar de los retrasos, Iberia reconoció que la situación en el día de hoy fue mejor que en los últimos días y que las demoras no fueron tan fuertes como las registradas el viernes y el sábado.

Ante las cancelaciones y retrasos, la Confederación Española de Organizaciones de Amas de Casa, Consumidores y Usuarios (Ceaccu) recordó que los afectados deben reclamar y exigir una indemnización por los daños causados, que podrían alcanzar los 900 euros por persona si se reclaman por vía judicial. La Ceaccu habilitó en su página web varios modelos de demandas judiciales para que los más de 700.000 afectados puedan hacer sus reclamaciones.