«Nos dejaremos la piel para que el nuevo hospital de Eivissa tenga radioterapia», declaró ayer el presidente de la comisión de sanidad del PP, Enrique Garcerán. «Haremos lo imposible para que la unidad de radioterapia sea una realidad en el nuevo hospital de Eivissa, cueste lo que cueste al PP», añadió.

El PP pidió ayer a la Asociación Española contra el Cáncer de Balears un nuevo informe técnico acerca de la viabilidad de la instalación del servicio de radioterapia ya que el presentado el lunes «no es aceptable por la falta de rigor» y, además, incidió en la falta de compromiso de la presidenta de la AECC, Teresa Martorell, a la que acusó de tibieza al instar al conseller de Salut, Vicenç Thomàs, al no descartar la radioterapia. «Es una frase tibia y de los tibios nos libre Dios; no apoya para nada a la población de Eivissa», señaló. En su opinión, la presidenta de la AECC de Balears «no representa para nada a la isla de Eivissa y dudo mucho que a la de Menorca».

Garcerán, que presenció el lunes la presentación del informe técnico, se quejó de la falta de rigor, «no en la confección del informe, pero sí en la recogida de datos» ya que se limitaron a los datos de la conselleria de Salut, el servicio de radioterapia de Son Dureta y algunos de la Policlínica Miramar, «pero no se contempló la realidad de Eivissa, no se recogieron datos del servicio de Oncología de Can Misses, ni de los pacientes que se desplazan a Barcelona o a su lugar de origen, como otras comunidades u otros países del mundo». También cuestionó que el informe expusiera que en un servicio de radioterapia en una actividad optima, se trataban a cuatro pacientes por hora. «Eso es cuando los pacientes son casi todos de 20 años, ágiles y fuertes pero hablamos de pacientes graves, muchos de ellos con movilidad bastante limitada y que llegan al aparato de radioterapia en sillas de ruedas o en camillas. El informe dijo que se trataba a cuatro pacientes por hora pero un paciente normal suele ocupar un tiempo de 35 minutos y no hablemos de los que están en camilla o silla de ruedas».

También destacó que los datos recogidos para las previsiones son del Instituto nacional de Estadística, «mientras que los datos que maneja el IB-Salut son superiores a los manejados por el doctor Javier Cortés».

En su opinión, si este informe se hubiera hecho cuando se pidió la UCI u otros servicios, «Eivissa no tendría UCI ni helicóptero ni el hospital de Formentera».

Carmen Castro resaltó que hay unanimidad de todas las fuerzas políticas para que el nuevo hospital cuente con radioterapia. «El pleno del Consell, el Parlament, la sociedad, el Defensor del Pueblo, empresarios y diversos colectivos han estado a favor de la instalación y lo más significativo es que hay 40.000 firmas recogidas. Es una cuestión de voluntad política y ya lo hemos expresado todos los partidos del Parlament y no tiene que venir esta señora aquí a decirnos lo que tenemos que hacer; venir aquí a decir lo que dijo, que se quede en Mallorca». El presidente insular del PP, MIquel Jerez, acusó a Teresa Martorell de «falta de sensibilidad e indiferencia absoluta» a los enfermos de cáncer.