El Castoro Sei, la isla flotante que se encargará de soldar y montar las tuberías que transportarán el gas desde la Península, llegó ayer a la costa de Sant Antoni para empezar desde hoy los trabajos del gasoducto.
Este barco de 152 metros de eslora, 70,5 metros de manga tiene una altura de 30 metros y capacidad para 3.600 toneladas. Se trata de uno de los buques insignia de Saipem, que es líder mundial en la construcción de infraestructuras marinas y se ha utilizado para el montaje de numerosos proyectos de todo el mundo, entre los que destacan el gasoducto entre Libia e Italia y el de Magreb-Europa. Además, pueden trabajar en esta embarcación hasta 300 personas, según se detalla en la web de Saipem. De hecho es uno de los ocho buques que hay en el mundo preparado para ejecutar este tipo de obras. Precisamente esta plataforma acaba de llegar de Almería donde ha participado en la construcción del gasoducto entre Argelia y Almería.
El gasoducto constará de dos tramos; el primero, Denia-Punta de Cala Gració tendrá una longitud de 123 kilómetros, con una profundidad máxima de 997 metros; el segundo, Sant Antoni de Portmany-Central Térmica de San Juan de Dios (Palma) tendrá una longitud de 145 kilómetros y alcanzará una profundidad máxima de 718 metros.
En total son 21.881 tubos los que hay que ensamblar. El diámetro del tubo será de 20 pulgadas y la presión de diseño prevista es de 220 bar. El caudal máximo de gas natural que transportará es de 676.000 metros cúbicos y llegará a Mallorca con una presión de 80 bar.
El pasado jueves el presidente de Enagás, Antonio Llardén explicó que hoy mismo comenzará el enfilado de la tubería en los microtúneles que se han perforado en Cala Gració. En diciembre se realizará el tendido de tubería del tramo Eivissa-Mallorca y en enero se ejecutará el tendido del tramo Eivisssa-Mallorca. Llardén explicó que durante marzo y abril se desarrollarán los trabajos de post-tendido y restitución de aterrajes; en mayo y junio, el precomisionado y, finalmente, en julio llegará el gas a las Islas. El presidente de Enagás explicó que el gasodcuto, que supone explicó que el gasoducto, que supone una inversión de 490 millones de euros, tiene capacidad para abastecer cuatro veces más el consumo actual.
La llegada del gasoducto evitará la emisión de 70.000 toneladas anuales de CO2 y reforzará la seguridad del sistema eléctrico de las Islas, ya que estarán conectadas con la Península.
Esta isla flotante ha permanecido desde el pasado mes de marzo en el puerto de Almería. En ella los operarios, la mayoría procedentes de Filipinas, han trabajado en tres turnos durante las 24 horas del día para que el proceso de construcción de las tuberías se realizara con la mayor celeridad posible. De hecho, según publicaba la prensa almeriense el pasado mes de marzo, ni siquiera se les está permitido salir del recinto portuario para garantizar que su rendimiento sea del cien por cien durante el periodo que dure el proceso de fabricación de los tubos.
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