El 25 por ciento de los alumnos del colegio Vara de Rey de Sant Antoni faltaron ayer a clase. Los padres decidieron no llevar a sus hijos al estar en desacuerdo con las medidas adoptadas ya que quieren un informe más profundo. «No se fían y no quieren traer a sus hijos en el centro», comentaba ayer la directora del colegio, Josefa Gil.
Los padres exigen una inspección técnica más profunda que no se limite sólo a la ocular. De hecho, la junta directiva de la Asociación de Padres y Madres de Alumnos del colegio ha convocado para hoy una asamblea general en la que expondrán sus inquietudes. Los padres más alarmados son, sobre todo, los que sus hijos estaban en una de las dos aulas cerradas tras al desprendimiento del falso techo hace una semana.
La delegada de Educació, Margalida Marí, recordó ayer que el informe elaborado por la Conselleria d'Educació «vuelve a certificar que no tiene daños estructurales» con lo que espera que una vez que dispongan los padres de ese informe «desaparezcan» los temores acerca de las garantías de seguridad del edificio pendiente de una reforma. «Creo que si los técnicos hacen un informe se ha de creer; si certifica lo que era primordial, que no hubiera daños estructurales en el edificio, da una seguridad que a mi personalmente me lo da», comentó la delegada.
La jornada en el colegio Vara de Rey fue ayer frenética. Mientras un grupo de padres se negaban a que sus hijos entraran en el colegio, los alumnos de infantil se reubicaban en las aulas prefabricadas del Cervantes que no disponen de un baño propio. La delegada recordó ayer que hay un compromiso para instalar en el baño en estas instalaciones provisionales aunque todavía no se ha materializado, lo que ha supuesto que algunos padres no trasladen a sus hijos. «Se instalarán lo antes posible; se han de adquirir e instalar. No puede ser ni en un día ni en dos pero estoy segura de que es inminente».
La delegada reconoció que el traslado a las aulas prefabricadas de infantil del Cervantes «se hizo de una forma apresurada y precipitada, ahora nos encontramos con esta situación pero sabemos el compromiso de la Conselleria y del Ayuntamiento para hacer esta instalación que interesa que se haga cuanto más rápido mejor».
El alcalde de Sant Antoni, José Sala, explicó ayer que la Conselleria d'Educació no tiene previsto efectuar el traslado de los niños de Vara de Rey al colegio de ses Païsses hasta Navidades. «No creo que se pueda hacer antes y no creo que estén en disposición de adelantarlo, además de que todavía hay que desmantelar el tendido eléctrico que cruza el terreno», explicó Sala, que pidió tranquilidad a los padres porque el desprendimiento del colegio de Vara de Rey es sólo «un desconchado» que no afecta en profundidad a la estructura. «Me fío de los técnicos y ellos dicen que no reviste peligro, por eso pido tranquilidad porque las cosas van a su ritmo y no se pueden acelerar; todos estamos en ello y estamos interesados en salvaguardar la integridad de niños y profesores». Sala recordó que tanto los técnicos municipales como de la Conselleria d'Educación certificaron que el colegio es seguro. «No hay peligro para que los niños sigan asistiendo a la escuela».
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