El conseller de Política Territorial del Consell, Miquel Ramon, respondió ayer a las críticas del GEN, que le acusó de no actuar con «rigor» a la hora de gestionar ante el Govern la compra de terrenos para su protección. Los ecologistas criticaban su «desinterés» y recordaban que ellos propusieron la compra de la extensión donde estaba previsto edificar el campo de golf.

Sin embargo, Ramon señaló ayer que el Consell sólo ha propuesto un terreno al Govern para que estudie la compra dentro del ámbito del antiguo parque de Cala d'Hort, y es una finca en Cala Llentrisca de 700.000 metros cuadrados. En ningún caso se ha propuesto el terreno del golf.

En el caso de Cala Llentrisca, lo que hizo Ramon es enviar al Govern la documentación que le dio la representación de la propiedad y adjuntar una valoración hecha por los técnicos del Consell, en la que se decía incluso el precio por el que podría vender el propietario.

«Pensamos que paisajísticamente era un terreno muy interesante en el litoral para entrar dentro de las compras que hace el Ministerio y que gestiona el Govern», explicó Ramon, que indicó que no sabe si el Ejecutivo autonómico ha empezado alguna negociación, pero no le consta. «No quiero cargar las tintas sobre el Govern, pero yo como Consell he cumplido», señaló Ramon, que recordó que la primera finca que se ha comprado en Eivissa ha sido esta legislatura, en es Amunts. «Yo volví a hablar con la propiedad y les dije que se pusieran en contacto con el Govern», añadió el conseller.

El Govern sólo ha comprado con el dinero del Ministerio una finca en Mallorca por 10 millones de euros.

El conseller recordó que el terreno en el que Calas del Mediterráneo quería construir el campo de golf se vendió hace tiempo a otros propietarios y aunque el Govern podría haber ejercido su derecho de tanteo y retracto para comprarlo a un precio asequible no lo hizo. «Si quieren explicaciones que se las pidan al Govern», sugirió Ramon a los ecologistas del GEN, que solicitaron hace tiempo que se adquirieran los dos millones de metros cuadrados de esta zona.

A Ramon también le preocupa que los ecologistas piensen que para proteger haya que comprar y recordó que aunque el Consell podría haberse dirigido al Ministerio para ofrecerle el terreno, éste habla directamente con las comunidades autónomas.