El Ayuntamiento de Sant Antoni ha emitido un informe desfavorable sobre el proyecto del edificio que prevé construir Ports de les Illes Balears en el mismo solar que ahora ocupan las oficinas portuarias.

Según el Consistorio, el rechazo se debe a una serie de «deficiencias que se han advertido» en el proyecto, por lo que consideran que lo que procede es «dejar el expediente sobre la mesa» hasta que se negocien «las mejoras correspondientes».

Según el informe del arquitecto municipal, uno de los problemas del proyecto es que no hace «ninguna referencia a la demolición» del actual edificio, ya que es aquí mismo donde Ports tiene previsto implantar el otro destinado principalmente a oficinas, dependencias de personal y a un local. Falta también «la definición del solar a utilizar», destaca el informe del arquitecto, ya que el edificio actual ocupa el 50% del solar, y es un «extremo no definido en ningún apartado del proyecto».

Asimismo, el informe emitido por el Consistorio incluye algunas recomendaciones del ingeniero técnico municipal. Las mismas hacen referencia a la necesidad de especificar «los diferentes usos» que tendrán las dependencias» y «las necesidades en cuanto a servicios se refiere». En este sentido, señala que las futuras instalaciones deben ser compatibles con las infraestructuras de la zona, en cuanto a electricidad, abastecimiento y telefonía. Además, el escrito destaca «el deficiente sistema de eliminación de aguas residuales» de toda la zona portuaria. «Está mal dimensionado para las necesidades actuales, hay frecuentes atascos, rebosamiento y presenta problemas de vehiculación», considera el escrito, así como también señala que «es mejorable y convendría remodelar el sistema de alumbrado urbano del entorno del futuro edificio y de toda la zona portuaria».

Por otra parte, en su informe, el ingeniero municipal indica que «el edificio se debería estudiar y programar dentro del conjunto de obras previstas, actuales y futuras, de remodelación del puerto de Sant Antoni» llevando a cabo simultáneamente «la renovación del emisario de la antigua depuradora». Por ello, asegura que si no se desarrolla de esta forma, «el edificio que se construya se ha de reducir lo mínimo indispensable para minimizar el impacto que causará».

El informe también indica que el nuevo edificio no debe ser «una pantalla edificatoria en un lugar tan emblemático del núcleo urbano de Sant Antoni y de toda la bahía» y que lo que procede «es ubicar las instalaciones en otro lugar, sugiriéndose a tal efecto que queden libres en la estación marítima».