La consellera balear de Afers Socials, Promoció e Inmigració, Fina Santiago, presentó ayer el borrador de la nueva Ley de Afers Socials, que está enfocada a arreglar «el gran desorden» de la actual ley de servicios sociales «que es de hace 20 años y está obsoleta». «El desorden se debe a que cada comunidad autónoma ha crecido como ha podido en Asuntos Sociales y eso ha hecho que las comunidades, consells y ayuntamientos tengan políticas de servicios sociales totalmente diferenciadas». Esto provoca, según la consellera, «que los consells insulares y municipios que son los que más cerca tienen a los ciudadanos son los que tengan que dar servicio sin orden ni ayudas económicas; que deba depender del voluntarismo y del sentido común», apuntó.

Asimismo, esta Ley establece que en menos de 18 meses se deberá aprobar por decreto una Carta de Servicios Sociales que «será la que dirá qué servicios son de derecho, cuáles prioritarios y cuáles serán los servicios mínimos que debemos tener por territorios». En este sentido, ejemplificó que uno de las normas de la carta estará enfocada a que «todas las personas mayores de 85 que viven tengan derecho a tener teleasistencia», algo que hoy es arbitrario, apuntó.

Por otra parte, la consellera también presentó la revista de Afers Socials que tiene como tema transversal la familia y que está enfocada a informar sobre el trabajo que se realiza en este campo desde las instituciones.