El mes de abril se cerró con un ligero incremento en el número de turistas que llegaron a las Pitiüses, un aumento que vino acompañado de una caída muy importante en el número de pernoctaciones, las cuales descendieron un 26,6%, con lo que la estancia media se situó en 4,09 días por visitante. Hay que remontarse a 2002 para encontrar un mes con una ocupación tan baja (4,21 días).

La encuesta de Coyuntura Turística Hotelera del Instituto Nacional de Estadística (INE) refleja que el mes pasado llegaron a las islas 34.837 viajeros, 516 más que en el mismo mes del año anterior.

El comportamiento del turismo nacional fue el que salvó el mes ya que se consiguieron 5.000 visitantes más, hasta los 29.000. Los turistas extranjeros, por contra, sufrieron una caída de 4.500 visitantes hasta los 5.750.

Este balance sería positivo, teniendo en cuenta que en 2007 la Semana Santa fue en abril y este año ha caído en marzo, si no fuera el descenso en unas 52.000 del número de pernoctaciones, que pasaron de 194.000 a 142.000.

El presidente de la patronal hotelera, Roberto Hortensius, apuntó que los datos del mes pasado no preocupan especialmente al sector puesto que están influidos en gran medida por la Semana Santa.

«La gran preocupación en estos momentos es ver cómo cerramos mayo y, por lo que estamos pudiendo ver, el inicio de la temporada está siendo más flojo de lo que esperábamos», aseguró.

Por otro lado, la encuesta del INE refleja que el pasado mes se encontraban abiertos 65 hoteles, que empleaban a 923 personas y que ofrecían casi 9.100 plazas de alojamiento.

El grado medio de ocupación por plaza se situó en el 52,2%, más de 15 puntos y medio respecto al año pasado. En cuanto a la ocupación por habitación, esta se situó en el 57,8%, un 5,4% menos.