B. MUNAR

Cruz Roja premiará esta tarde la solidaridad y fidelidad de sus socios e instituciones con una placa realizada por el ceramista Antoni Ribas Costa, Toniet. Esta placa que reproduce un olivo milenario se entregará al socio más antiguo que tiene la entidad, Juan Riera Roig, y a la obra social de Caja Madrid.

En este acto, la entidad presentará las cuentas a sus socios y «explicaremos lo que hemos hecho con los donativos de las personas y de las entidades privadas y públicas». García destacó que las dos emergencias más importantes que se atendieron el año pasado fue el hundimiento del Don Pedro y la amenaza de bomba en el aeropuerto de Eivissa.

El presidente de la entidad manifestó que también se realizan servicios preventivos en actos culturales y deportivos en los que necesitan las ambulancias. García destacó que de las tres que tenían el año pasado, una se dio de baja en agosto, otra está conveniada con el 061 doce horas al día durante todo el año y sólo «disponemos de una totalmente». Según el presidente se necesitarían cinco ambulancias.

Asimismo, desde la entidad también destacaron los acompañamientos sociosanitarios y los transportes adaptados que se realizan. Para ello, la Cruz Roja dispone de cuatro autobuses y dos furgonetas con las «que cubrimos todas las rutas y todos los pueblos. Pero con la entrada en funcionamiento de la residencia de Can Blai y la futura entrada en servicio de las residencias de Sant Antoni y Sant Jordi serán insuficientes porque los servicios se incrementarán».