En el espacio se pueden ver embarcaciones de todo tipo a diferentes precios. Foto: MARCO TORRES

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os gusta mucho navegar y querríamos comprarnos un barquito o una lancha de siete u ocho metros que no sea muy cara; quizá de segunda mano. La feria está bastante bien, pero nos parece todo un poquito caro», explicaba Juan Antonio Marí, que se acercó hasta la feria náutica de Santa Eulària para ver si encontraba la posibilidad de adquirir una embarcación a un precio razonable. La decimosexta edición de esta feria se inauguró ayer con 14 empresas expositoras y, sobre todo, con un sol espléndido. Los 4.000 asistentes del año pasado, aproximadamente, avalan el éxito de esta cita con el mundo del mar. Una de las novedades de este año es que se ha cambiado la ubicación, pues hasta el próximo domingo se puede visitar en el final del puerto deportivo (cerca del Palacio de Congresos, en el espigón). «Hace 16 años, cuando el puerto deportivo empezaba a tener mucho movimiento, la Asociación de Náutica de Pimeef decidió crear este evento, que en un principio estaba más enfocado a los barcos de ocasión. Poco a poco ha ido cambiando y ahora la mayoría de embarcaciones son nuevas», aseguró Paco Morente, presidente de las estaciones náuticas de Santa Eulària. El horario de visita hasta el próximo domingo es de 11,00 a 20,00 horas, ininterrumpidamente.

María José Real