Hospital de campaña de Cruz Roja instalado a las afueras del Space el pasado verano.

Los servicios médicos ubicados en el interior de espacios recreativos (especialmente discotecas) realizaron el pasado año 1.319 atenciones sanitarias, de las que 1.064 fueron a clientes de los establecimientos, según pone de relevancia un estudio realizado por la empresa Emergency Staff que destaca que entre junio y octubre se tuvo que atender a 427 personas por atenciones sanitarias relacionadas con el consumo de drogas. Tan sólo en 30 ocasiones la víctima tuvo que ser trasladada al hospital.

El análisis de los partes de atención de los servicios médicos contratados por los mismos locales de ocio refleja que durante el pasado año se realizaron 6'25 atenciones médicas por fiesta, lo que supone una media de una emergencia cada hora y media.

Del total de servicios a clientes, 601 fueron a personas que reconocieron haber consumido algún tipo de droga (incluido el alcohol) en las últimas ocho horas, si bien sólo en 427 casos existía una relación directa entre el uso de los estupefacientes y la consulta al médico o enfermero de la sala.

En estos últimos casos, la mayoría de los pacientes presentaban mareos o alteraciones de la consciencia, mientras que si no se había consumido droga, el tipo de urgencia atendida se encaminaba más a los pequeños cortes y lesiones.

La mayoría de los atendidos (un 60 por ciento) reconoció haber realizado un policonsumo de sustancias en las últimas horas, normalmente la mezcla de dos sustancias. El coctel más habitual referido por los pacientes era la combinación de alcohol y éxtasis (en un 69 por ciento de los casos).

Estas dos sustancias son las más populares entre los consumidores de drogas. El 93 por ciento de ellos aseguraron haber bebido, mientras que recurrieron al MDMA un 45 por ciento. En tercer lugar se sitúa la ketamina, con un 19 por ciento de los casos, a la que sigue el GHB (éxtasis líquido) y la cocaína el 11 por ciento.

El estudio de Emergency Staff también refleja la evolución en el consumo de los diferentes tipos de droga en función de la edad del usuario. Así, en el caso de los más jóvenes (entre 18 y 25 años), se refirió que se había consumido alcohol en un 52% de los casos, éxtasis en un 25 por ciento y cocaína un 5 por ciento. Por contra, entre los mayores de 40 años el alcohol estaba presente en el 46 por ciento de los casos, el éxtasis bajaba hasta el 18 por ciento, mientras que la cocaína alcanzaba el 12 por ciento, la ketamina el 15 por ciento y el GHB se quedaba en el nueve por ciento.

Según los autores del estudio, el análisis de los datos que ha facilitado la comparativa de los partes de atención médica refleja que la prestación de un servicio sanitario dentro de los locales de ocio permite limitar el número de traslados a un centro médico hasta en un 93 por ciento de los casos.