El gerente del Área de Salud y el director ingeniero de las obras hicieron un repaso de cómo evoluciona la reforma del hospital.

BÀRBARA MUNAR

Las obras de reforma del hospital Can Misses estarán finalizadas a principios del próximo mes de julio. Así lo afirmó ayer el gerente del área de salud de las Pitiüses, Francisco Cárceles, durante la visita que hizo junto al director ingeniero de las obras de ampliación de la clínica.

Según el gerente del Àrea de Salud, con esta nueva infraestructura la sanidad pitiusa contará con 32 camas más que se ubicarán en el «ala este» de la tercera planta del nuevo edificio. De estas camas, ocho irán destinadas a pacientes de cirugía mayor ambulatoria y las otras 24 serán para atender a personas hospitalizadas. En consecuencia, a partir del próximo mes de julio, el hospital Can Misses tendrá un total de 213 plazas para enfermos ingresados.

En el ala «oeste» de la tercer piso se colocará el hospital de día que medirá unos 60 metros cuadrados y que contará con 4 habitaciones de 16 metros cuadrados. Hasta ahora, el hospital de día sólo disponía de dos habitaciones que eran más pequeñas. En esta misma planta, también se reubicarán las consultas de Oncología, los despachos de Medicina Interna y el área de Neuropsicología.

Pacientes en observación

Con esta ampliación, Can Misses también dispondrá de dos áreas de observación que estarán ubicadas en la planta baja. Según Cárceles, servirán para atender pacientes que no «están para irse a casa, pero que tampoco necesitan ser ingresados. De esta manera, podremos tenerlos en observación sin ocupar los pasillos de urgencias. Así los profesionales tendrán más espacio para trabajar y en verano podremos cubrir todas las necesidades». En estas dos áreas de observación se colocarán siete boxes que en casos de necesidad se podrán ampliar en dos más.

En la segunda planta se encuentran los dos quirófanos nuevos y en la planta menos uno el almacén que «se ha adecuado a las normativas europeas. Servirá para colocar todos los suministros, el material tecnológico y los historiales clínicos», comentó Cárceles.

Estas obras son un modificado del plan inicial en el que se preveía ampliar el bloque quirúrgico de cuatro a seis quirófanos. Según matizó Cárceles, para poder explotar los seis quirófanos al cien por cien eran necesarias más camas y por este motivo se cambió el proyecto inicial. De forma que los almacenes que antes estaban en la planta tercera, ahora se han reubicado en la planta menos uno y el hospital de día, que antes estaba en el ala este de la tercera planta, ahora se colocará en el ala oeste. Estos movimientos han sido necesarios para dejar libre la zona este de la tercera planta en la que se ubicarán las 32 nuevas camas.

Estos trabajos, que se iniciaron el pasado 14 de marzo, tienen un coste de siete millones de euros que el Govern Balear financiará.

Los dos nuevos quirófanos del hospital Can Misses están en funcionamiento desde la semana pasada y el gerente del área de salud de las Pitiüses, Francisco Cárceles, ayer confirmó que ya se han realizado «intervenciones de cirugía mayor que se podrían haber llevado a cabo en los otros quirófanos». Cárceles reconoció que «realmente estos quirófanos son más pequeños que los anteriores», pero aseguró que pese a ello, permiten realizar operaciones más complicadas. El gerente explicó que ya se han realizado intervenciones con los diferentes servicios del hospital «para que los profesionales se vayan adaptando a los espacios».

Sobre el nuevo hospital, Cárceles recordó que el plan inicial ya se ha realizado y que está en vías de tramitación. Según dijo, está previsto que en breve salga el concurso de ideas para a continuación, colocar la primera piedra y poner en marcha las obras de esta nueva infraestructura.

Desde el área de salud del hospital Can Misses ayer no se pudo concretar cuántos profesionales acudirán a la huelga que, previsiblemente, empezará el próximo 22 de abril. Francisco Cárceles explicó que los profesionales pueden decidir en el último momento si se van a adherir o no al paro, «pero lo que sí podemos garantizar es que habrá unos servicios mínimos para atender todos los servicios críticos» que se presenten durante las jornadas de huelga.

Desde la gerencia se ha hecho llegar a todos los profesionales médicos los diecisiete puntos que el Ib-Salut presentó recientemente para llegar a un acuerdo y evitar el cese. Desde la gerencia se ha pedido a los médicos que hagan una «reflexión» porque las «huelgas no benefician a nadie y a quien menos a los pacientes», dijo Cárceles, quien también recalcó que hay muchos profesionales que están valorando las condiciones del Govern Balear.