El ciudadano de Reino Unido con un poder adquisitivo medio alto todavía puede encontrar buenas oportunidades para comprar su segunda residencia en Eivissa en un entorno menos saturado que otras zonas turísticas de la Península.

«La limitación del urbanismo en Balears en general, y en Eivissa en particular, ha pasado de ser un problema a suponer una ventaja puesto que las islas no tienen un mercado tan saturado como la Costa del Sol o la Costa Blanca, donde el desarrollo urbanístico ha llegado al a saturación», explicó ayer Francisco Muñoz, responsable en España de la red de oficinas del banco Halifax, entidad británica especializada en el mercado hipotecario que ayer abrió su primera sucursal en Eivissa.

«Esta situación no sólo beneficia al comprador extranjero sino que también favorece al vendedor local puesto, aunque la crisis también está afectando a las Pitiüses, el nivel de reducción de los precios es menor que en otras áreas», añadió.

Halifax no fue la única entidad extranjera que ayer inauguró una oficina en la isla. Barclays también abrió una sucursal en Santa Eulària.