La Conselleria de Medi Ambient se ha comprometido a realizar una actuación especial en la depuradora de Sant Antoni que ayude a eliminar los olores para no afectar a la escuela de infantil y primaria de can Micolau que se levantará en un solar de la zona de sa Serra, muy cerca de la planta.

Medi Ambient ha decidido ejecutar esta mejora porque la Comisión balear de Medi Ambient acordó en su reunión del 20 de diciembre no aprobar la construcción de este centro hasta que no se arreglen los problemas de malos olores de la depuradora. El centro tampoco podrá entrar en funcionamiento hasta que no esté terminada la red viaria proyectada y hasta que no se establezcan medidas para disminuir los riesgos de tráfico y accidentes alrededor del centro. Además, la Conselleria d'Educació deberá insonorizar el edificio dada la proximidad con las vías de tránsito.

Desde Medi Ambient aseguraron ayer que la Conselleria no está exenta de las prescripciones de la Comisión balear de Medi Ambient pese a pertenecer al mismo departamento y por eso acometerán estas mejoras en la planta, que serán independientes de la inversión anunciada hace pocos días de 6'8 millones para remodelar la depuradora.

En el Ayuntamiento de Sant Antoni se quejan de que ahora la Comisión balear de Medi Ambient ponga trabas a la construcción de este colegio cuando en la zona ya se ha dado permiso para una residencia y un instituto y no se ha puesto ninguna condición pese a que la depuradora también está al lado. Desde Medi Ambient reconocen que en estos dos casos también se tendría que haber condicionado el tema de los olores, aunque no se cayó en la cuenta y ahora los proyectos ya están aprobados.