El hospital registró ayer una jornada tranquila y la poca actividad provocó que incluso hubiera aparcamiento. Foto: IRENE G. RUIZ

La huelga de médicos provocó ayer la anulación de 506 consultas y 16 intervenciones quirúrgicas en el hospital Can Misses donde, según cifras del IB-Salut, secundaron la huelga un 28,2 por ciento de los médicos, con unos servicios mínimos del 37%. En los centros de salud, el 81,6 por ciento de los pacientes tuvieron que coger cita para otro día porque el 45 por ciento de los facultativos secundaron el paro. Los servicios de urgencias tanto del hospital como de los centros de salud tuvieron más demanda que otros días, aunque «sin llegar al colapso».

Como es habitual en estos casos, las cifras ofrecidas por el IB-Salut y el Sindicato Médico no coincidieron. Los convocantes aseguraron que el seguimiento en Eivissa y Formentera fue del 93 por ciento, el 91 por ciento en Can Misses y el 95 por ciento en Atención Primaria. Sin embargo, el director médico de Can Misses, Antoni Cuñat, y el director de Atención Primaria, José Antonio Martínez, ofrecieron unos datos bastante inferiores: en el hospital siguieron la huelga el 28,2 por ciento de los médicos, con unos servicios mínimos del 37,2 y un 45 por ciento en Atención Primaria, donde hubo un 28,5% de servicios mínimos.

De los 900 pacientes que debían acudir a alguna consulta en Can Misses sólo fueron atendidos 394 (un 44%). «Estas visitas que han quedado pendientes habrá que reprogramarlas para los próximos días en los huecos que puedan ir quedando, Atención al Paciente lo irá haciendo poco a poco pero es un tema que nos interesa solucionar cuanto antes», explicó Cuñat, que aseguró que costará menos reprogramar las visitas que han quedado pendientes en los centros de salud, donde el 81 por ciento de las citas fueron ayer anuladas.

En cuanto a pruebas diagnósticas, restaron por hacer 90 análisis de laboratorio en Can Misses y se suspendieron 19 ecografías, aunque en radiología el paro no tuvo incidencias, según el Ib-Salut. Las mismas fuentes indicaron que la huelga afectó a un 66 por ciento de la actividad inicialmente prevista en el hospital. Ningún paciente tuvo que ser trasladado a la Policlínica. Tampoco se recibió ninguna queja por escrito, aunque tanto Cuñat como Martínez indicaron que probablemente «habrá habido quejas» verbales. Se da la circunstancia de que los centros de Atención Primaria de Eivissa fueron los que contaron con un mayor seguimiento de Balears, con un 45 por ciento, cuando en Menorca sólo lo secundaron un 8% y en Mallorca un 39%.

El director financiero del Ib-Salut, Luis Carretero, insistió ayer en que está «siempre abierto» al diálogo y que, de hecho, este fin de semana se han puesto en contacto con el Sindicato Médico para tratar de evitar la protesta. Carretero se mostró sorprendido por el paro porque las huelgas suelen tener lugar cuando «fracasa una negociación, pero no cuando ésta ni ha comenzado». Los médicos recuerdan que reivindican mejoras laborales y profesionales. «El efecto de la huelga no es tanto, porque las visitas se pueden reprogramar y aunque se aumenten las listas de espera lo peor es que los médicos pierdan la confianza con la Administración y cada vez quieran venir menos a las Pitiüses», explicó el portavoz de los médicos pitiusos, Nacho Fernández.