R. L. El conseller de Salud, Vicenç Thomàs, espera que finalmente haya un acuerdo con el Sindicato Médico de Balears, que ha convocado una serie de paros en la sanidad pública a partir del 3 de marzo, porque, de no ser así, los más perjudicados serán los ciudadanos. En declaraciones a Efe tras firmar con el ministro de Sanidad, Bernat Soria, un convenio para la puesta en marcha del Plan de Salud Bucodental, Thomas señaló que la huelga sería un «fracaso de todos», tanto de la Administración como de los sindicatos, que perjudicará de manera especial a los pacientes. Thomàs ha confiado en que el Sindicato Médico de Baleares estudie y valore la oferta efectuada por el Govern balear, después de lamentar que haya decidido convocar una huelga sin responder siquiera antes a la propuesta del Ejecutivo autonómico. En cualquier caso, ha atribuido la culpa de la situación actual al anterior Govern del PP, presidido por Jaume Matas, que en cuatro años sólo subió 1'5 euros la hora de guardia, y no fue capaz de convocar una mesa de negociación para abordar la situación de los médicos internos residentes (MIR). Los paros están convocados para los días 3 y 4 de marzo en toda la Comunidad Autónoma y a esta huelga la seguirá otra el día 12 de los médicos de Menorca, Eivissa y Formentera. Para el día 13 de marzo están llamados al paro los médicos internos y residentes de Balears, mientras que el día 25, afectará a todos los facultativos de Mallorca.