La Fiscalía pide una pena de tres años de prisión e inhabilitación especial, además de una multa de 3.600 euros, a B. C. R. y a V. J. E. por haber vertido una «gran cantidad de residuos urbanos» en la finca ses Planes d'en Furnet, en Jesús. Estas actividades pueden haber comportado un riesgo «grave» de contaminación del acuífero y sobre las personas porque en la zona existe una captación de agua para riego y uso doméstico.

En 2002 los agentes de la Guardia Civil detectaron que en la finca Vicent de ses Planes, cerca de la cantera ses Planes de Jesús, se habían estado vertiendo durante doce años residuos urbanos por parte de la empresa Contenedores Pitiysos sin autorización municipal y con el único permiso del dueño del terreno, ya fallecido, y de su hijo. Ambos, según Fiscalía, tenían pleno conocimiento de este vertido, que se hacía para rellenar un bancal para cultivo.

En 1997 se pidió autorización municipal para rellenar mediante escombros la zona con el fin de hacer bancales. La Conselleria d'Agricultura del Govern informó desfavorablemente en 2006 y el Ayuntamiento previamente había denegado el permiso en 1998. En 2002 la dirección general de Recursos Hídricos informa además de que este emplazamiento incumplía la Ley de aguas. Poco después el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil precintó judicialmente estas instalaciones.

Desde la defensa alegan que el responsable de tirar los escombros llevaba haciéndolo muchos años porque rellenaban bancales destinados al cultivo y por eso se solicitó la licencia.

El juicio oral de esta causa debería haberse celebrado esta semana aunque fue suspendido por la huelga de funcionarios de justicia y no se ha señalado una nueva fecha. La fiscal pidió en su escrito de acusación que se interrogara a los acusados y que declararan como testigos los agentes del Seprona que intervinieron en este caso. También solicitó la citación de un ingeniero de Obras Públicas, del funcionario de Medi Ambient que realizó la inspección y de un biólogo.