s vecina de Sant Antoni desde hace 105 años y ahora su nombre formará parte del pueblo por mucho tiempo. Antonia Marí Ramón, conocida también como 'Cala' o 'Mestra Cala', es una de las mujeres más conocidas y apreciadas de Sant Antoni y desde ayer tiene una calle que lleva su nombre, la calle Antonia 'Cala' Modista.

Longeva, buena consejera y con una intensa y extensa vida familiar y social fue homenajeada por el Ayuntamiento con un emotivo acto de inauguración al que no faltaron amigos y familiares.

La placa que ahora nombra su calle (ubicada en la travesía Ramón i Cajal, esquina con el bar Rumbo) fue descubierta ayer por la mañana, celebrada con una demostración de ball pagès y agradecida por la propia Antonia que, a sus 105 años, habla con claridad y en esta ocasión, con micrófono en mano: «No tengo palabras para darles las gracias, considero al pueblo de Sant Antoni mi familia propia porque me ha tratado siempre con mucho cariño, lo digo de corazón», aseguró la homenajeada que no quiso dejar de contar cuál es su secreto para vivir tanto tiempo, unas palabras que muchas amigas presentes conocían a la perfección e incluso repitieron a coro cuando las pronunció. «Comprensión, resignación y paciencia. Conformarme tanto con lo que me agrada como con lo que no, y paciencia para aguantar todo lo que el destino me tiene reservado», agregó Antonia.

Adelantada para su tiempo
Antonia 'Cala' fue una mujer adelantada para su tiempo. Trabajó como costurera y a su vez enseñó a coser a muchísimas mujeres de la isla. También creó la primera colla de ball pagès que ya actuaba en los años 50 en fiestas y hoteles para turistas, además de ser pionera en organizar guateques. Esta centenaria, conocida por todos por ser una mujer emprendedora, vive en la actualidad sola en su casa de Sant Antoni y se vale de un bastón para caminar. Tiene tres nietos y tres bisnietos que viven en Valencia, y que ayer estuvieron presentes para acompañarla en este encuentro. «Es un día que para mi abuela es especial», explicó su nieta Yolanda Montesa, que definió el carácter de su abuela, cuya vida ha sido una intensa lucha por salir adelante con talento, voluntad y paciencia. «Ella es una mujer muy fuerte, creo que esa es la primera palabra que utilizaría para definirla pero no por su edad sino por su temperamento y por cómo afronta las cosas», agregó Yolanda, que también fue la encargada de ofrecer un discurso durante el evento al que no le faltaron las lágrimas, las risas y la emoción de familiares y amigos. lLuciana Aversa