B. R. El concejal del Casco Histórico, Marc Costa, anunció ayer que el consistorio contará con los servicios de una empresa especializada en patrimonio histórico y cultural para solventar la grieta aparecida en la muralla tras una fuga de agua, que se produjo el pasado viernes.

Este hecho provocó un hundimiento en el suelo que abrió una grieta en el parapeto de la muralla así como varios daños en dos viviendas ubicadas en la calle de Sa Creu, en Dalt Vila. Costa indicó que tras la redacción de un informe técnico se ha decidido realizar una «intervención de manera urgente» con el fin de solventar el problema. En el caso de las dos viviendas dañadas, el concejal apuntó que en uno de los casos el inmueble está deshabitado mientras que en el otro, el consistorio ya se ha puesto en contacto con el inquilino para que abandone por unos días la vivienda. Según Marc Costa no existe ningún problema ya que esta persona se mudará a otro piso del mismo edificio. Una vez que se deshabilite esta vivienda, los técnicos municipales realizarán un nuevo informe sobre los inmuebles y arreglar las deficiencias que se hayan producido y tomar así «las medidas pertinentes». De hecho, Marc Costa quiso resaltar que la administración cuenta en todo momento con la valoración de los técnicos y la información de los profesionales.

En relación a las consecuencias derivadas por esta fuga de agua, Costa señaló que el Ayuntamiento asumirá todas las responsabilidades «con independencia de las relaciones que tenga el consistorio con la empresa municipal del servicio del agua».