El Ayuntamiento de Sant Josep ha presentado nueve alegaciones al proyecto de evaluación de impacto ambiental sobre el campo de golf de Platja den Bossa impulsado por el Grupo Matutes. Entre sus alegaciones a este proyecto el Consitorio gobernado por PSOE-Eivissa pel Canvi considera que «se hace una valoración insuficiente de posibles efectos sobre las aguas subterráneas», debido a que esta instalación «implicaría un uso intensivo de plagicidas, herbicidas, prodcutos fitosanitarios que pueden provocar efectos graves sobre los acuíferos». Tampoco se prevén, según las alegaciones del Consistorio, medidas para la evacuación de aguas superficiales, «quedando cortrado en el proyecto el torrente de ca na Parra». Sant Josep también considera que no se evalúa «suficientemente la transformación geomorfológica de la zona» ya que hay que tener en cuenta que serán necesarias 390.000 metros cúbicos de tierra.

Por otra parte, la evaluación de impacto ambiental «no tiene en cuenta la construcción de la nueva autovía», ya que el estudio es anterior a la construcción de la nueva vía del aeropuerto y se habla de «trazado aproximado», según el consistorio josepí.

Por otro lado, Sant Josep alega que «falta un estudio arqueológico, de una zona donde se han encontrado importantes restos, sobre todo durante la construcción de la autovía». También los progresistas creen que «no hay análisis de los valores etnológicos del área afectada». Por último aseguran que tampoco se han hecho estudios de los efectos de las comunicaciones entre el centro urbano de Sant Jordi y la zona turística de Platja den Bossa.