R. L.
Tras el vuelco electoral vivido en el Consell, confirmado el pasado miércoles con el recuento de los votos correspondientes al Censo de Españoles Residentes Ausentes (CERA) y que otorgó el gobierno a la coalición PSOE-ExC, la Plataforma Antiautopista ha dado a conocer una serie de exigencias respecto a los proyectos viarios, entre las que destaca la eliminación del 'scalextric' de Jesús «por suponer una barrera paisajística y no solucionar los problemas de tráfico de la zona».

Además, exigen una auditoría económica de la concesión de las obras, revisión y redimensionamiento de los proyectos donde sea posible, no continuar con el túnel de Sant Rafel, revisión de los expedientes de expropiación para que se pague de una manera más justa a algunos expropiados y, a la vez, la agilización de los pagos «paralizados a todos aquellos que se opusieron a las obras y que en represalia todavía no han cobrado». La Plataforma considera el resultado de las elecciones como un «éxito de la movilización ciudadana» a raíz de los proyectos impulsados «contra la mayoría». Los activistas señalaron que los ibicencos han dicho en las urnas lo que llevaban clamando desde hacía casi cuatro años y que denunciaba la Plataforma, es decir, «que los proyectos faraónicos de las autovías se hacían sólo a medida de unos intereses muy concretos, que eran desmesurados, caros, agresivos con el territorio, innecesarios y no suponían una solución a las necesidades viarias». En este sentido, remarcaron que la población se ha indignado con lo que consideran como prepotencia y ceguera política de los gobernantes, ahora en funciones, «que no quisieron escuchar el clamor popular, patente en la última manifestación de 22.000 personas».

La Plataforma también mostró su indignación ante las declaraciones de Stella Matutes al afirmar que desconoce si el túnel «presentaba los elementos de seguridad a los que obliga la normativa europea». Recuerdan que denunciaron muchas veces que no cumplía la ley y la consellera «siempre lo negó diciendo que mentíamos y manipulábamos», cuando «la seguridad era la excusa para justificar tanta obra faraónica». Los activistas seguirán adelante con las denuncias y confían en que PSOE-ExC cumpla sus promesas.