Un embajador de campeonato

El pin de oro con las siluetas de Eivissa y Formentera, una pequeña joya que desde el año pasado simboliza este reconocimiento, le fue entregado al chef alemán, aprovechando su visita a la isla, con motivo de un intercambio gastronómico con restauradores pitiusos.

«Esperamos que ahora sean ellos los que puedan venir a Berlín y que podamos fomentar aún más este intercambio de cultura gastronómica», aseguró Zurbrüggen, que en 1999 ganó el campeonato mundial de Risotto en Piamonte (Italia) y que en la actualidad regenta un restaurante en la capital alemana llamado Baltazar.

Palau destacó que este nombramiento se realiza «en base a las atenciones que tiene con nosotros», un agradecimiento que surge de las visitas que el equipo de gobierno realizó a Berlín con motivo de la feria internacional de turismo ITB, y donde surgió la idea del intercambio gastronómico .

Por su parte, Zurbrüggen destacó «el honor» de recibir el nombramiento y remarcó que el intercambio ya está en marcha «porque también hemos hablado de firmar convenios con los cocineros».

Degustaciones
Este fin de semana, Zurbrüggen ha realizado una gira de degustaciones por cinco restaurantes de las Pitiüses donde compartió con recetas y conocimientos con restauradores locales. Esta propuesta, organizada por la revista Ibiza Style, le llevó por las cocinas del Royal Plaza, Club Náutico Sant Antoni, y los restaurantes Casa Colonial, Pequeña Isla y Madrigal, donde los asistentes pudieron saborear un amplio menú que fusionó los productos y el saber de la gastronomía local con la maestría en la elaboración del Risotto de Zurbrüggen.

Luciana Aversa