El presidente de la gestora de la Federación Socialista Pitiusa (FSP-PSOE), Marià Torres, negó ayer que el partido haya recibido comisiones del proyecto Eivissa Centre y explicó que cuando fue nombrado presidente repasó las cuentas y en ningún momento el ex secretario general le comunicó que hubiese «ningún tema pendiente en cuestión de comisiones». El dirigente también mostró su extrañeza porque este tema salga a la luz después de tantos meses, por lo que lo atribuyó a un «montaje mediático». Además aseguró que las declaraciones de Roque López hacen dudar de su «ética socialista», por lo que en la próxima reunión de la gestora analizarán si le expulsan del partido. De hecho, durante la mañana de ayer fuentes del PSIB avanzaron esta medida disciplinaria contra López, aunque luego Torres matizó que la decisión todavía no estaba tomada. Preguntado sobre si alguno de los implicados habían mostrado su intención de dimitir, Torres aseguró que ni Sandra Mayans ni Josep Marí Ribas se sienten «vinculados» a estas acusaciones, por lo que «nadie tiene por qué poner su cargo a disposición del partido». De hecho, Torres aseguró que Marí Ribas le ha dicho que en ningún momento hizo las declaraciones que publica 'El Mundo'. «Se tendría que investigar cómo se han hecho estas grabaciones; para nosotros no tienen ninguna fiabilidad y es posible que hayan sido manipuladas». Por todo ello, la FSP está sopesando interponer acciones legales.

La también integrante de la gestora María Torres explicó que no puede haber dinero negro porque los pisos son de protección oficial «y van a precio tasado». «Son todo meras infamias», añadió Torres, que se preguntó dónde está Roque López. «¿Está escondido?, ¿ha emigrado?, ¿por qué no denunció ante el juzgado de guardia si estos hechos son verdad? ¿encubre algo?, ¿está metido en algo?, ¿por qué lleva una grabadora continuamente?». La socialista también se preguntó qué credibilidad puede tener un medio que todavía defiende la relación entre el 11-M y ETA y recordó que la empresa Brues también ha hecho el metro de Palma, contratada por el PP.